Recientemente, han surgido acusaciones que señalan a inmigrantes haitianos en Springfield, Ohio, de estar sacrificando mascotas de sus vecinos para consumo. Sin embargo, autoridades locales han desmentido categóricamente estas afirmaciones, que carecen de cualquier prueba o respaldo.
Varios líderes republicanos, incluido el candidato a vicepresidente JD Vance y figuras como el senador Ted Cruz, han contribuido a la difusión de estas acusaciones infundadas. Las afirmaciones sostienen que inmigrantes haitianos en la ciudad han matado y comido mascotas, así como aves de parques públicos. No obstante, la policía de Springfield ha informado que no hay registros de incidentes relacionados con animales desaparecidos o sacrificados por inmigrantes.
El diario local Springfield News-Sun informó que las acusaciones parecen haber surgido de una publicación en un grupo privado de Facebook dedicado a temas locales. En dicho grupo, un usuario afirmó sin pruebas que la hija de un vecino había encontrado su gato muerto en la propiedad de un inmigrante haitiano. Sin embargo, la policía de Springfield no tiene reportes oficiales de que algo así haya sucedido.
Otra afirmación sin fundamento vincula la polémica con el arresto de Allexis Telia Ferrell, quien fue detenida en Canton, Ohio, tras ser acusada de matar y comer un gato en público. Sin embargo, Ferrell no es de origen haitiano y ha vivido en Ohio por más de 18 años, lo que refuerza la falta de conexión con la comunidad haitiana.
Autoridades locales, incluidas Karen Graves, gerente de Participación Estratégica de Springfield, y Leann Castillo, directora ejecutiva del Distrito de Parques de Clark County, han dejado claro que no existe evidencia ni reportes que respalden las acusaciones contra los inmigrantes haitianos. Ambos funcionarios han instado a la comunidad a no dejarse llevar por rumores sin fundamento.
Springfield, una ciudad con aproximadamente 58,000 habitantes, ha visto un aumento en la llegada de inmigrantes haitianos en los últimos años. Se estima que alrededor de 20,000 haitianos se han establecido en la región, lo que ha generado un debate entre los residentes sobre los efectos de este crecimiento poblacional.
La retórica antiinmigrante ha aumentado tras un accidente en el que un haitiano estuvo involucrado en un choque contra un autobús escolar, resultando en la muerte de un menor. Este incidente ha sido aprovechado por algunos para avivar la hostilidad hacia la comunidad inmigrante, utilizando un lenguaje similar al empleado por el expresidente Donald Trump en sus campañas. Trump y sus aliados ya habían señalado a los haitianos en el pasado, acusándolos falsamente de propagar enfermedades como el SIDA.
JD Vance, actualmente senador por Ohio, ha retomado los argumentos de algunos residentes, afirmando que los inmigrantes están sobrecargando los servicios sociales y provocando caos en la región. A pesar de estas acusaciones, las autoridades continúan desmintiendo cualquier vínculo entre la comunidad haitiana y las actividades criminales que se les atribuyen sin pruebas.
(Con información de "Univision Noticias")
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