Un reciente estudio del Instituto de Políticas Migratorias de Washington ha revelado que los inmigrantes no están desplazando a los afroestadounidenses en el mercado laboral, desafiando una percepción común en los debates políticos. El informe muestra que tanto los trabajadores nacidos en Estados Unidos como los inmigrantes están aumentando su presencia en el entorno laboral sin afectar negativamente a la comunidad negra.
La inmigración ha sido un tema candente en la política estadounidense, con algunos argumentando que los inmigrantes están "quitando" trabajos a los ciudadanos, especialmente a los afroestadounidenses. Sin embargo, el estudio sostiene que, a pesar de la discriminación y los desafíos sistémicos, los afroestadounidenses están disfrutando de un mercado laboral robusto. Al mismo tiempo, la presencia de inmigrantes en sectores como la construcción ha crecido, pero no a expensas de los trabajadores nacidos en el país.
Según la Oficina de Estadísticas Laborales, la proporción de trabajadores nacidos en el extranjero ha aumentado un 20 % en los últimos tres años, un ritmo superior al de los trabajadores nacidos en Estados Unidos. Este crecimiento ha llevado a la percepción errónea de que los inmigrantes están desplazando a los afroestadounidenses, cuando en realidad ambos grupos están expandiéndose en diferentes sectores del mercado laboral.
El estudio también señala que el movimiento de inmigrantes entre diferentes sectores y regiones puede haber contribuido a la idea de un "desplazamiento" que en realidad no existe. Por ejemplo, en el sector de la construcción, la proporción de hombres negros nacidos en Estados Unidos ha disminuido desde 1990, pero esto se debe a múltiples factores, incluyendo la globalización y los cambios tecnológicos, más que a la competencia directa con inmigrantes.
El expresidente Donald Trump y otros líderes han afirmado que los inmigrantes están desplazando a los trabajadores afroamericanos, pero estas declaraciones han sido criticadas por su falta de fundamento. Una encuesta de AP-NORC realizada en marzo mostró que algunos afroestadounidenses temen que la inmigración pueda reducir sus oportunidades laborales, aunque los datos no respaldan esta preocupación.
El Centro de Estudios Migratorios, por su parte, argumenta que los cambios en la fuerza laboral se deben a problemas como el crimen y la dependencia del servicio público, y sugiere que los legisladores deberían enfocarse en fomentar el empleo entre los ciudadanos en lugar de permitir la entrada de más inmigrantes.
A pesar de estos debates, el estudio concluye que la convivencia entre trabajadores nacidos en Estados Unidos e inmigrantes es una realidad cada vez más común, y que ambos grupos deben adaptarse a los cambios en la economía global. Según el Centro de Investigación Pew, desde 1965, la mitad de los inmigrantes que han llegado a Estados Unidos provienen de América Latina, y en 2022, 30 millones de inmigrantes formaban parte de la fuerza laboral del país.
(Con información de "VoA")
Shakira regresa a latinoamérica: fechas confirmadas para su gira 'El Regreso World Tour'
Hace 3 días