El emblemático restaurante La Carreta, en el Vedado, La Habana, reabriría este mes con una imagen renovada, después de un largo tiempo abandonado.
Una escueta publicación a principios de junio en Facebook de una página llamada “Restaurant La Carreta Cuba”, apunta que, por el momento, solo la cafetería presta servicios. “El restaurant La Carreta por el momento se encuentra en restauración, se espera que antes de que termine el mes abra sus puertas al público nuevamente”, explica.
“Por el momento, estamos prestando servicios en nuestra cafetería que está ubicada al lado del restaurante. En nuestra cafetería tenemos excelentes ofertas con precios asequibles”, agrega la información sobre el local ubicado en la céntrica dirección de Calle 21 esquina a K.
El restaurante permaneció décadas bajo administración del Estado antes de caer en el abandono. A finales de año, llamó la atención de los cubanos la demolición del lugar, uno de los más conocidos del Vedado.
El medio CiberCuba informó que había escrito a uno de los encargados del local, pero se rehusó a responder las preguntas enviadas, alegando que no era asunto de su competencia. Otra fuente habría asegurado a dicha publicación que La Carreta será un local gestionado por una entidad privada.
La Carreta estuvo cerrada por años mostrando las ruinas de lo que fuera uno de los restaurantes más populares de la capital cubana. En marzo del pasado año, las autoridades gubernamentales tapiaron el inmueble con bloques alrededor para evitar que las personas continuaran robándose lo poco que quedaba en el sitio. En 2019, colgaron un cartel advirtiendo que el sitio se encontraba en peligro de derrumbe.
En noviembre pasado, varios cubanos también denunciaron en redes sociales que la icónica rueda de madera que identificaba al restaurante, había desaparecido. “Este restaurante se encuentra en ruinas hace mucho tiempo, quedaba en la acera su identificación, una vieja rueda de madera, que al verla en la acera sus habitantes de El Vedado sabían que ahí se encontraba el reconocido restaurante La Carreta”, significaba un usuario.
El restaurante había sido fundado por un polaco que le dio el nombre de Restaurant Vienés. Tras la llegada de la revolución castrista, el lugar pasó a ser propiedad estatal y se le dio un aspecto de “ranchón”, renombrándolo “La Carreta”. Desde entonces, el sitio vivió sus mejores épocas entre 1960 y 1980.
La Carreta, en las inmediaciones de la popular heladería Coppelia, representa uno de los negocios en manos del Estado que se suma a la larga lista de sitios destruidos y en total ruina.
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