"Una de las obras más sui géneris de Rolando López Dirube, actualmente en peligro extremo de desaparecer, tanto como el conjunto escultórico ya presentado en el pórtico Naroca de Boca de Jaruco, son las pinturas murales que sobreviven de la decoración de la antigua iglesia de Santa María del Mar (Loma), elaboradas en la década de los años 1950, cuando se inició la urbanización en esa localidad del municipio de La Habana del Este", dijo este miércoles César O. Gómez López.
"Estas pinturas ya han sido presentadas en otras publicaciones en Facebook (Mercy Pla, o en Palabra Nueva Cuba) pero la urgencia de su salvaguarda nos obliga a insistir en su propia existencia en aquel edificio ruinoso, que se mantiene por el cuidado de un lugareño", dijo Gómez en Facebook.
"La Iglesia de Santa María del Mar se construyó siguiendo la tendencia moderna y racionalista de la arquitectura cubana de la época, que acompañaba una urbanización que quedó lastrada con la llegada de la década de 1960".
"Esta capilla, como otras tantas de las planificaciones urbanas de las zonas de playa, fueron clausuradas y retirada la custodia a la Iglesia de Cuba. En los últimos años, han ido recuperando gradualmente sus funciones religiosas, pero la que nos toca sigue en similar situación de abandono, al igual que la de la Playa Veneciana".
"Pues bien, Dirube ejecutó un conjunto de paneles alrededor del Altar Mayor de trazos lineales que se entrecruzan, y sólo se logra definir en un lateral, una Virgen y tal vez un ángel reclinado, entre los murales que se difuminan por el paso de los años. Sirva esta publicación como llamada de alerta 'in extremis' para su protección", afirmó.
Ante la denuncia, varios cubanos lamentaron el estado de abandono de esas y otras construcciones en La Habana. "Hay tantas cosas que proteger y conservar de nuestra arquitectura-cultura-arte, donde la desidia impera, que es bochornoso y doloroso que esto pase, y lo peor, es que es un mal que agrede a toda la Isla".
"Es simplemente una imagen, una más, del estado ruinoso de nuestra nación cubana. Dios permita que más temprano que tarde hallemos todos el camino de nuestra restauración. Oh Señor, envía tu Espíritu, y repuebla la faz de esta tierra cubana".
"Precisamente ayer (miércoles) hice un pequeño recorrido por una parte de Centro Habana y La Habana Vieja y sin ningún tipo de matiz político, le digo que me sentí muy mal. Soy cubana 100% y amo la tierra que me vio nacer. Yo diría que hay tantas cosas, de todas las esferas del país, que se han perdido por no protegerlas, que creo que la poquísimas que quedan ya no tendrán salvación, pues por difícil que sea, a los que pudieron y pueden salvarlas, no les interesa".
"Cuando se quiere, se puede. Es una muy triste realidad y no es un problema político, es no saber dónde están parados los que tienen que autorizar salvarlas. A mí cada día me deprime más ver cómo se ha perdido y se pierde la historia constructiva y artística de nuestra isla, entre otras cosas. Ojalá que los que queda, tengan salvación".
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