En un reportaje exclusivo para ADN Cuba, Yasser Reinoso Ramos, un ciudadano cubano residente en el reparto Cuba Libre, en Pinar del Río, ha denunciado el abandono total del gobierno y las condiciones extremas en las que vive debido a su oposición al régimen.
Reinoso, quien asegura no haber confiado nunca en el gobierno de la isla, enfrenta serias dificultades económicas y sociales, ya que, según sus declaraciones, las autoridades le han negado cualquier oportunidad de trabajo debido a su postura política. Sin ingresos y sin ayuda estatal, su vivienda se encuentra en un estado crítico, sin posibilidades de reparación.
El opositor recalca que las promesas del régimen, especialmente tras desastres naturales que afectan con frecuencia a la región occidental de Cuba, no se han traducido en mejoras reales para su comunidad. Aunque las autoridades anuncian programas de reconstrucción y reciben donaciones internacionales, Reinoso afirma que estos recursos nunca llegan al pueblo. "Las ayudas siempre terminan en manos de los mismos, pero nunca al alcance de quienes realmente las necesitan", comentó.
La situación de Reinoso no es un caso aislado, sino un reflejo del trato sistemático que reciben quienes se oponen al régimen cubano. La exclusión social y económica, así como la falta de acceso a beneficios básicos, son herramientas comúnmente utilizadas por el gobierno para castigar a los disidentes.
Organizaciones internacionales han denunciado repetidamente estas prácticas represivas, señalando que los derechos humanos básicos son frecuentemente violados en la isla. En el caso de Reinoso, su postura política le ha costado la posibilidad de vivir con dignidad.
Mientras el gobierno cubano se presenta ante el mundo como una nación solidaria que lucha por la igualdad, testimonios como el de Reinoso Ramos exponen una realidad diferente: una población empobrecida y dividida, donde quienes alzan su voz contra el sistema enfrentan abandono y represalias.
La historia de este cubano no solo resalta las duras condiciones de vida en una isla en crisis, sino también el alto costo de ser opositor en un régimen que, en lugar de proteger a sus ciudadanos, parece ignorar sus necesidades más básicas.
Esta información, reportada por ADN Cuba, pone en evidencia el contraste entre las promesas oficiales y la realidad que enfrentan miles de cubanos en su día a día.
Rechazan en Miami campaña publicitaria de Ana de Armas por vínculos con dictadura cubana
Hace 2 días