La vocera oficialista Arleen Rodríguez Derivet, conductora del programa televisivo Mesa Redonda, aparece en imágenes publicadas recientemente sobre las fiestas y lujos de la cúpula del poder en Cuba.

Rodríguez se ha caracterizado durante décadas por defender a capa y espada el sistema político de la isla, así como la figura del fallecido dictador Fidel Castro. Pero tal fervor no parece ser desinteresado y ciertos privilegios salieron a la luz en el material que reveló el periodista Mario J. Pentón en América Tevé.

“Una pequeña parte de los periodistas oficialistas también participa de este selecto grupo, como es el caso de Arleen Rodríguez Derivet, amiga del gobernante Miguel Díaz-Canel y una de las principales defensoras del castrismo en la televisión y la radio del régimen”, denuncia el reportero.

Si bien las imágenes son de una gran fiesta celebrada en el restaurante Rancho Palco, en 2018, sirven para demostrar la vida que lleva la cúpula castrista y los herederos del poder en Cuba, pero también, al parecer, quienes se ocupan de limpiar la imagen de los “líderes” cada día en los medios de comunicación gubernamentales.

En el video, Díaz-Canel y su esposa Lis Cuesta salen bailando casino divertidamente. La fiesta estuvo organizada por Juan Guillermo Almeida, hijo menor del fallecido "comandante de la Revolución" Juan Almeida Bosque, y director de una orquesta de música bailable. Almeida fue uno de los hombres más cercanos a Fidel y Raúl Castro y una de las figuras de la guerrilla contra el presidente Fulgencio Batista.

También aparece Berta González Hernández, esposa de Juan Almeida; Antonio Castro, hijo de Fidel Castro; y Raúl Guillermo Rodríguez Castro, más conocido como "El Cangrejo", nieto y escolta personal de Raúl Castro. Este último incluso se anima a subir a la “tarima” y bailar junto a Juan Guillermo.

“Repite conmigo: salud, amor, euros”, se le escucha decir al hijo de Almeida para animar al público. “Sigue conmigo que queda cerveza cantidad. (El Palco) la pone, no hay cráneo”, aseguró. “Los herederos de aquellos comandantes que derrocaron a Fulgencio Batista hoy disfrutan del botín de sus padres y son una casta cerrada, a la que solo se entra por obediencia, complicidad o apellido”, dijo Pentón con anterioridad.

“A la cúpula castrista no le importa lo que pase con el pueblo cubano. Ellos nada más que ven hacia adentro. A ellos nada más que les importa el bienestar de ellos. Y eso se ve en todas sus cosas: los aviones de lujo que tienen, en los cuales pueden viajar la familia de los Castro a Canadá constantemente”, aseguró el investigador cubano Luis Domínguez.

Pentón también publicó fotos de la boda del hijo menor de Almeida. “Lujo en cada mesa, un sitio exclusivo, en este caso el Hotel Nacional y una larga lista de invitados entre los cuales estuvo la familia Castro”, apuntó. Según el periodista, “para las fiestas de los gobernantes no falta nada ni existen las tradicionales excusas del embargo económico de Estados Unidos”.

Un espacio conducido justamente por la vocera Rodríguez Derivet, fue el que acusó a Pentón a finales de mayo de hacer “terrorismo”, luego de que el periodista informara de una presunta amenaza de bomba en el Hotel Tulipán, de La Habana. “Lanzar falsas alarmas de bombas o explosivos para desatar pánico es, efectivamente, terrorismo, y se penaliza fuertemente en Cuba y en muchos otros países que endurecieron sus leyes antiterroristas, a partir de dolorosas experiencias de este tipo”, advirtió el portal Cubadebate.

Rodríguez Derivet igualmente defendió las frivolidades de Lis Cuesta en Twitter, planteando que la esposa del gobernante cubano empleaba la ironía en sus publicaciones y que además se trataba de una cuenta personal, por lo que no debía responder a ciertos estándares de comunicación.

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