Se agudiza crisis energética tras salida del sistema de la Felton
Redacción de CubitaNOW ~ martes 11 de febrero de 2025
La crisis energética en Cuba sigue sumergiendo al país en un panorama cada vez más sombrío. La reciente salida de la unidad 1 de la termoeléctrica "Lidio Ramón Pérez" (Felton) del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) se suma a una serie de eventos desafortunados que complican aún más la situación.
Este martes, la Unión Eléctrica (UNE) de Cuba confirmó que la termoeléctrica Felton se desconectó debido a una falsa alarma del sensor de hidrógeno del generador, lo que subraya los problemas técnicos constantes que aquejan a la infraestructura eléctrica del país.
Felton había sido reconectada al SEN solo cuatro días antes, tras permanecer fuera de servicio desde el 30 de enero por un mantenimiento planificado. En esos días, los técnicos de la planta lograron limpiar solo una pequeña parte de los más de 22,000 tubos de su condensador, lo que pone de manifiesto la magnitud del atraso en los trabajos de reparación.
La planta, que había sido desconectada para someterse a una revisión profunda, fue incapaz de operar a plena capacidad debido a estos retrasos y a la falta de recursos, lo que impacta negativamente en la estabilidad del suministro eléctrico en todo el país.
La conexión de la Felton al SEN es vital, ya que esta termoeléctrica tiene la capacidad de reducir los apagones en casi cinco horas. Sin embargo, cuando se encuentra fuera de servicio, la situación empeora considerablemente, pues se pierde una de las fuentes de energía más importantes para el país.
La UNE había anunciado que la planta había vuelto a la red a principios de este mes, pero los problemas persistieron y ahora la salida de Felton 1 del sistema agrava aún más el panorama.
Por si fuera poco, la situación en otras termoeléctricas no es mejor. Actualmente, seis unidades termoeléctricas están fuera de servicio debido a fallas técnicas o trabajos de mantenimiento, lo que representa una pérdida significativa en la capacidad de generación de electricidad del país. De estas, dos están averiadas: la unidad 1 de la Central Termoeléctrica (CTE) Santa Cruz y la unidad 2 de la CTE Felton, mientras que las restantes se encuentran en mantenimiento.
Entre ellas se incluyen la unidad 2 de la CTE Santa Cruz, las unidades 3 y 4 de la CTE Cienfuegos y la unidad 5 de la CTE Renté. Estos trabajos de mantenimiento son cruciales, pero la falta de recursos y la obsolescencia de las plantas dificultan su reparación rápida y eficiente.
El panorama se agrava aún más debido a la escasez de combustible, un factor que se ha convertido en la principal barrera para afrontar la demanda de energía en el país. Las termoeléctricas cubanas dependen de combustibles fósiles, cuya importación se ha visto gravemente afectada por la crisis económica y las sanciones internacionales. Esta falta de combustible ha obligado a las autoridades a racionar la electricidad de manera más estricta, lo que ha llevado a cortes de luz de hasta varias horas en muchas regiones del país.
Este contexto de escasez de energía eléctrica se ha traducido en un sufrimiento diario para la población cubana. Los apagones no solo afectan la vida cotidiana de los ciudadanos, sino que también afectan gravemente a la industria, los servicios de salud y otros sectores fundamentales para el funcionamiento de la sociedad.
Las personas se ven obligadas a recurrir a soluciones improvisadas, como el uso de generadores eléctricos caseros o la cocina con leña, lo que implica un esfuerzo adicional y aumenta los costos de vida.
La situación es aún más desesperante para los sectores más vulnerables, como las madres que deben lidiar con la falta de electricidad para mantener a sus hijos alimentados o los enfermos que dependen de equipos médicos eléctricos para sobrevivir. La crisis energética también ha afectado a las escuelas y hospitales, que sufren apagones constantes que interrumpen el funcionamiento normal de estos centros.
Las familias cubanas han tenido que adaptarse a la nueva realidad de los cortes de luz, con horarios de trabajo reducidos y actividades cotidianas que deben ajustarse a la impredecible llegada de la electricidad.
A pesar de los esfuerzos del gobierno por paliar la crisis energética, la situación no parece mejorar. La reactivación de la Central Termoeléctrica "Antonio Guiteras", que debía conectarse al SEN a plena capacidad este lunes, ha tenido algunos problemas y la promesa de reducir los apagones en el corto plazo sigue siendo incierta. El país se enfrenta a un déficit energético crónico, con miles de megavatios de demanda insatisfecha, lo que pone a prueba la resiliencia de la población cubana.
En resumen, la crisis energética en Cuba sigue siendo una de las principales preocupaciones de la población. Con la salida de Felton del sistema, la situación se agrava aún más, sumándose a una cadena de problemas técnicos y estructurales que han dejado a la Isla al borde del colapso eléctrico.
La falta de recursos, la obsolescencia de las infraestructuras y la escasez de combustible siguen siendo los principales obstáculos para resolver la crisis energética, que afecta a todos los sectores de la sociedad y pone en peligro el bienestar de los cubanos. La desesperanza crece y la solución parece aún lejana.