Las autoridades migratorias de Estados Unidos liberaron con un parole al joven cubano Pablo Mantilla Masa, quien el pasado 22 de mayo llegó a las costas de la Florida en una tabla de surf.

Mantilla salió de Varadero y tras seis horas y media de travesía logró llegar a su destino.

El joven conversó con el periodista Rolando Nápoles, del canal América TeVé, a quien ofreció las primeras declaraciones tras salir del centro de detención en el que se encontraba.

Según su testimonio, preparó meticulosamente durante mucho tiempo su viaje.

"Todos los días yo navegaba en Cuba, estudié el tiempo, en programas de internet, los vientos, todo, todo, para que nada fallara. Estudié cada día a la hora que iba a cambiar el viento y aproveché el sur-sureste que es el que te impulsa hacia las costas de Florida", dice.

"De hecho, aproveché también el polvo del Sahara que venía entrando a la zona oriental y así no me lograban ver", agrega.

"Le pasé por el lado a los botes, a los cruceros, y nadie se daba cuenta porque quién iba a imaginarse que un cubano venía así".

Mantilla Masa contó que en el camino sólo tomó agua con azúcar que llevaba en una mochila para hidratarse durante el trayecto.

"Traía una mochila de hidratación. En Cuba eso es agua con azúcar y era lo que traía con un absorvente que es para eso".

También aseguró que había grabado imágenes de toda la travesía.

"Estoy feliz de estar vivo y haber hecho una cosa única", dijo.

Sobre los obstáculos en el viaje cuenta que a unos 50 km de Cuba comenzó a ver muchas algas y eso lo atrasó.

Pablo Mantilla dijo que había viajado a una velocidad máxima de 42 kilómetros por hora y a una promedio entre 30 y 32.

"Me demoré también porque documenté y paré en varias ocasiones y conversé personas en botes que encontré en el camino".

Hace pocas semanas el buzo cubano Elián López escapó también de la isla en una tabla de windsurf.

“Elian López Instructor de Buceo en Varadero, Matanzas se lanzó en una tabla de surf al mar en busca de Libertad, y sobre todo en un estado delicado con una enfermedad que necesita medicamentos urgentes los cuales no tenía en Cuba y lo llevó a tomar esta decisión de desesperación”, explicó el reporte tras su salida.

Según contó su travesía duró alrededor de un día y medio. “Yo salí a las 7:14 de la mañana del martes y me recoge la guardia costera después de la puesta de sol del miércoles, yo calculo que fueron casi 37 horas”, dijo.

“El viento no sopló con la fuerza que planteaba el pronóstico, es cierto que conlleva un mayor desgaste físico navegar en esas condiciones, pero proporciona una gran velocidad, lo cual permite en poco tiempo cubrir una gran distancia”, agregó.

“Yo tengo una colostomía permanente, una bolsa para recoger mis desechos. Esto influyó bastante en tomar esta decisión, además de otros motivos. Se hace difícil lidiar con esta condición cuando uno no tiene los insumos necesarios. Hay algunas condiciones que puedes tratar con remedios naturales a falta de recursos, pero una colostomía no puede sustituirse”, señaló.

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