Este sábado, el activista por los derechos humanos Guillermo del Sol decidió poner fin a 55 días en huelga de hambre, con la cual llamó la atención sobre los cientos de cubanos que no tienen permitido salir del país.

Desde Santa Clara del Sol expresó a 14ymedio “me impulsó que son demasiadas ya las personas que me lo estaban pidiendo y no se puede ser tozudo en la vida, hemos logrado mucho, no creo que porque se haya parado la huelga se acabó la lucha ni el reclamo”.

Fue en horas del mediodía cuando tomó la decisión de abandonar tantos días de inanición, “pienso seguir ayudando a todos porque yo puedo ser un regulado mañana y en Cuba hay muchas cosas que hacer y me necesitan más vivo que muerto, necesitan la experiencia”, explicó al mencionado medio.

Por casi dos meses Guillermo se mantuvo sin probar alimentos, su estado de salud se depauperó al punto de que medios internacionales y políticos llamaron la atención sobre su caso.

De acuerdo con el cubano, pocos días después de iniciar su protesta "a mi hijo le quitan la regulación pero yo había tomado la decisión de extender mi reclamo a todos los regulados".

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