Luis Robles Elizastigui, el joven cubano que protestó de manera pacífica hace algunas semanas en el boulevard de San Rafael, en La Habana, sigue en prisión y ha sido victima de torturas y amenazas.

Así lo confirmó su hermano, Landy Fernández Elizastigui, a la prensa independiente, al decir que ha sufrido torturas, amenazas y malos tratos en la cárcel.

Fernández Elizastigui aseguró en una reciente entrevista con 14yMedio que su hermano siempre "ha pensado diferente respecto al régimen", por lo que "simple y llanamente se cansó, dijo basta y quiso protestar pacíficamente".

Después de la protesta, a Robles lo arrestaron agentes policiales que lo llevaron a Villa Marista, uno de los principales centros de la Seguridad del Estado en La Habana.

Lo multaron con 1.000 pesos cubanos y lo acusaron de "otros actos contra la seguridad del estado".

Después de saber lo que estaba viviendo su hermano en prisión, Landy Fernández se comunicó con una empleada de Atención a la Población, quien "dijo que iban a ordenar una investigación para saber si era cierto, pero la cosa quedó ahí".

"El abogado me aconsejó detener el proceso ahora hasta que se pueda reunir con mi hermano nuevamente y preparar bien la defensa con el testimonio de todos los malos tratos que ha recibido en prisión. Yo estuve de acuerdo, porque de lo contrario saldría directamente del Combinado para un tribunal sin saber bien de que lo acusan. Él tiene conocimiento de una parte gracias a que he hablado con algunos compañeros suyos, pero desde abril no he podido hablar más con él y no conoce todos los detalles", explicó Landy Fernández.

Fue el pasado 4 de diciembre cuando este joven levantó un cartel, pidió libertad para el artista contestatario Denis Solís y mostró su solidaridad con los activistas del Movimiento San Isidro.

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