Descarga gratis nuestra App

Jornada voluntaria de Díaz-Canel: propaganda fotográfica mientras Cuba enfrenta miseria y crisis sanitaria

Redacción de CubitaNOW ~ domingo 23 de noviembre de 2025

Article feature image

Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba y presidente de la República, participó recientemente en una jornada de trabajo voluntario en la empresa Agroindustrial Los Tamarindos, en Artemisa, en conmemoración del aniversario 66 de la primera jornada del Guerrillero Heroico Ernesto Che Guevara. La actividad fue ampliamente difundida por el perfil oficial de la Presidencia en la red social X, con fotos y mensajes que resaltan el esfuerzo del mandatario y su comitiva.

Sin embargo, lo que el gobierno cubano presenta como “trabajo voluntario” resulta, en la práctica, un ejercicio de propaganda cuidadosamente escenificado. Las imágenes muestran a Díaz-Canel y a los altos funcionarios del Comité Central del PCC con vestimentas que poco tienen de laborales, posando junto a surcos agrícolas mientras se enfatiza la continuidad del ejemplo del Che. La estética de las fotos, más cercana a un set fotográfico que a labores agrícolas reales, refleja cómo el aparato estatal convierte cualquier actividad en una exhibición política.

El hilo oficial destaca la participación de dirigentes sindicales, como Ulises Guilarte de Nacimiento y Ernesto Colina, quienes recordaron que desde aquellas primeras jornadas de trabajo voluntario los cubanos “fueron más solidarios” y contribuyeron a la construcción de hospitales, escuelas y al incremento de la producción agrícola. La narrativa oficial enfatiza que el trabajo voluntario es la vía para superar retos nacionales, incluyendo la recuperación de las provincias orientales tras el paso del huracán Melissa y la “higienización de barrios y centros de trabajo ante la complejidad epidemiológica”.

Pero mientras las fotos buscan transmitir un mensaje de productividad y solidaridad, la realidad en Cuba es muy diferente. La población enfrenta escasez de alimentos, medicinas y recursos básicos, junto a un aumento de enfermedades causadas por virus y problemas de higiene que no se resuelven con jornadas voluntarias de alto perfil mediático. La puesta en escena de Díaz-Canel y su comitiva contrasta con la desesperación de millones de cubanos que, en vez de contar con ayuda real, solo reciben la imagen cuidadosamente construida de un líder activo y cercano al pueblo.

El espectáculo mediático refuerza la narrativa oficial de que la dirección del país se preocupa por los problemas de la gente, mientras desvía la atención de la ineficacia del Estado para enfrentar crisis estructurales. La jornada de trabajo se convierte, así, en un ritual propagandístico: fotos posadas, discursos sobre la solidaridad y el ejemplo del Che, y un mensaje de acción que poco tiene que ver con la producción real o la mejora efectiva de la vida de los cubanos.


Recomendado para ti

Tambien te puede interesar