El Pontón, así de destruida está su piscina a la espera de financiamiento
Redacción de CubitaNOW ~ sábado 15 de octubre de 2022
El abandono es una constante en Cuba y las instalaciones deportivas, en particular las piscinas, no escapan a esa triste realidad, según informó este sábado el medio oficialista Cubadebate. Una de las más afectadas es la piscina del El Pontón, en el combinado deportivo José María Pérez Capote, en Centro Habana.
"Con mejor o peor suerte, las instalaciones habaneras –campos de béisbol aislados, gimnasios o complejos polideportivos–, han sufrido el paso del tiempo y en ese devenir se han combinado las limitaciones económicas por las coyunturas de crisis, la falta de financiamiento o las presiones externas y medidas coercitivas sobre Cuba, las urgencias para presupuestos concentrados en otros sectores, los embates de fenómenos meteorológicos y falta de conservación, negligencias u olvidos", señaló la citada fuente.
"El deterioro de esas áreas incide directamente en la motivación de atletas, entrenadores y pueblo en general para la práctica de la actividad física", apuntó Cubadebate que dijo que el Gobierno y el Instituto de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER) tienen una política de "rescate de las instalaciones deportivas".
Aunque La Habana tiene 512 piscinas, 300 están evaluadas de bien, 201 de regular y 11 de mal.
Osvaldo López Peña, inversionista de la Dirección Provincial de Deportes de La Habana explicó a Cubadebate que las piscinas "son difíciles de recuperar, porque se necesita de un equipamiento especializado y un alto financiamiento que no tenemos. En La Habana no hay una empresa especializada que se dedique a la reparación integral de las piscinas. Valoramos la idea de rescatarlas con la ayuda de algunas MIPYMES".
Lo más engorroso es el trabajo con los equipos cloradores. "Este proceso se realiza hoy de forma manual prácticamente en el 10% de las piscinas de la capital. Se vierte hipoclorito de sodio por la mañana, antes de que los estudiantes comiencen la clase de natación, y en la tarde se vuelve a dar otra cloración, aunque no es lo ideal para las piscinas".
López precisa que las piscinas llevan un tanque de compensación, equipos cloradores y de filtro, para que el agua esté en óptimas condiciones. "La mayoría de esos medios hay que importarlos y el país no cuenta con recursos para hacerlo", dijo a Cubadebate.
Idaymis Sánchez Febles, directora de El Pontón, lleva 24 años trabajando en esa instalación. "Cuando llegué, la instalación estaba en estado deplorable. A medida que pasó el tiempo, fueron rescatados los dugouts y se pintaron las áreas exteriores e interiores. Se logró mejorar la iluminación. Eso fue una primera etapa, el año pasado".
En El Pontón queda pendiente una reparación capital que incluya las áreas de baloncesto y voleibol. "Ya tenemos una brigada que está realizando la chapea de las áreas verdes".
Según los vecinos, la piscina lleva vacía unos 25 o 30 años. La directora dijo que ya se aprobó el presupuesto para repararla.
"Hoy las piscinas muestran un conjunto de ruinas que enmudece, totalmente abandonadas, llenas de gravilla y maleza, mientras las instalaciones hidráulicas se deterioran. Antes se usaban en el plan vacacional y que muchos de sus hijos aprendieron a nadar allí e incluso obtuvieron resultados en los Juegos Escolares", dijo Cubadebate a partir de testimonios de los vecinos.
La torre de la plataforma de clavados, que data desde la fundación del Pontón, tuvo peligro de derrumbe y se dictaminó la demolición. "Causaba más pérdidas repararla. El acero estaba oxidado y reventado. Cuando den el presupuesto continuará la reparación. Ya se inició con el descorche. Después de un fuerte aguacero, el agua de lluvia ha llegado a cubrir el fondo de la piscina, siendo la evaporización por la intensidad del sol su sistema de drenaje".
El Pontón tendrá una reparación capital solo de sus albercas entre los cinco o seis millones de pesos. "Aunque ya hicimos un trabajo de descorche y limpieza de la estructura de debajo de las piscinas, donde deben ir los tanques de compensación, paramos las acciones constructivas por el financiamiento. Además, tuvimos que demoler la base de trampolines, que estaba en peligro total de derrumbe y era una amenaza potencial para atletas, entrenadores y trabajadores del centro", dijo el directivo del INDER en La Habana a Cubadebate.