En marzo de 2022, el Instituto Superior de Diseño Industrial (ISDI) cerró las puertas de su emblemática sede en Belascoaín, entre Estrella y Maloja, en Centro Habana, debido a un “complicado fallo arquitectónico”. Tres años después, en enero de 2025, la edificación terminó por derrumbarse, confirmando los temores sobre su deterioro.

Durante este tiempo, los estudiantes vivieron una etapa de dispersión académica, tomando clases en instalaciones “prestadas” por el Ministerio de Educación Superior y la Universidad de La Habana, sin un espacio común que favoreciera la convivencia universitaria y el intercambio creativo.

La situación generó tensiones, incluyendo una carta abierta en la que alumnos exigieron la renuncia del decano, así como reportes que atribuían el colapso del edificio a la falta de mantenimiento y errores constructivos.

Ahora, medios estatales han confirmado que el ISDI tendrá nueva sede en el inmueble que hasta el pasado curso albergaba al Instituto Politécnico Pablo de la Torriente Grau, ubicado en 1ra y 32, Miramar. Según informó Cubadebate, aunque las clases del curso 2025–2026 probablemente continúen en locales temporales, ya han comenzado las labores de diagnóstico, diseño y aprobación de proyectos, contratación de constructores y compra de materiales para su remozamiento integral.

El traspaso fue posible gracias a un proceso de reordenamiento coordinado por el MINED y el Gobierno central, que, según las autoridades, se llevó a cabo con “sensibilidad” para garantizar la continuidad de la formación académica.

La proyección es que el nuevo edificio, completamente renovado, abra sus puertas en los próximos meses como un espacio “funcional, seguro y estéticamente atractivo”, listo para acoger a las futuras generaciones de diseñadores y convertirse nuevamente en un centro de creatividad, innovación y cubanía.

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