El dictador cubano Miguel Mario Díaz Canel Bermúdez, recorrió este jueves el barrio San Isidro, en La Habana, para darse un baño de cámaras y no de pueblo, como debería ser.

Allí, justamente donde se gestó uno de los más importantes movimientos de oposición que existen en la isla, el régimen trató de montar un escenario en el que parezca que se escucha al pueblo.

De las imágenes del dictador en el sitio se hacen eco, a esta hora, todos los medios de comunicación estatales, alegando que fue a escuchar a líderes comunitarios, sin embargo, los verdaderos líderes comunitarios no estuvieron.

Luis Manuel Otero Alcántara, líder del MSI, por ejemplo, continúa en prisión acusado de desacato y otros cargos por salir a la manifestación del pasado 11 de julio y llamar a los cubanos a unirse.

“El presidente @DiazCanelB está en el barrio de San Isidro. Amanece en este Consejo Popular de la #HabanaVieja donde dialoga con líderes comunitarios de la capital con el fin de fortalecer el trabajo social en los barrios. Se habla de retos y obstáculos para impulsar esta labor”; dijo Hola Habana.

“El artista Luis Manuel Otero Alcántara fue trasladado al centro Penitenciario Vivac y de allí lo trasladarán a la prisión de Guanajay por los mismos "delitos" que le han construido a Maykel Osorbo: Atentado, Resistencia y Desacato”, denunció días atrás la activista Claudia Genlui Hidalgo.

“Luis estaba listo para esto y para lo que sea que venga... El 11 de julio el sintió la emoción de la libertad, de un pueblo unido en la calle, digno y por eso salió”, argumentó la joven.

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