Las llegadas de balseros cubanos a los Cayos de Florida, en Estados Unidos, son escenas cada vez más comunes para los residentes del área, como la que atestiguaron vecinos de Key Colony Beach en la mañana de este martes, cuando migrantes desembarcaron con gritos de alegría.

Un residente dijo a la prensa que es la segunda llegada reciente de balseros frente a su edificio. Uno de los migrantes dijo a Local 10 News que el grupo de 19 personas procedía de Matanzas, de donde salieron el domingo.

Agentes de la Patrulla Fronteriza de EE. UU. llegaron a la playa en cuestión de minutos, seguidos de efectivos de la Patrulla de Carreteras de Florida (FHP) y agentes estatales del Departamento de Cumplimiento de la Ley de Florida.

La presencia de autoridades se ha reforzado en los Cayos de Florida luego de que el gobernador Ron DeSantis declarara el estado de emergencia y estableciera, a través de una orden ejecutiva, una operación de múltiples agencias en el área.

El documento permite la intervención de la Guardia Nacional y otras fuerzas del orden estatales. El alcalde del condado de Monroe valoró la ayuda promovida por DeSantis. “Creo que a medida que esta información llegue a Cuba y el Caribe, disuadirá a algunos de los migrantes de venir aquí”, dijo.

La víspera, un teniente de FHP declaró que la misión de la agencia será principalmente humanitaria. Los soldados serán abastecidos con suministros y agua para los migrantes que lleguen.

El presidente Joe Biden viajó a México para reunirse con su homólogo mexicano el lunes después de visitar la frontera sur durante el fin de semana, la primera vez desde que asumió el cargo en la Casa Blanca. Biden destacó su plan migratorio, que incluye una nueva política ya vigente para comenzar a devolver en la frontera de Texas a cubanos, haitianos y nicaragüenses, así como a venezolanos que llegan ilegalmente.

Greg Abbott, gobernador de Texas, comentó que el plan del presidente está muy retrasado con respecto a la crisis en la frontera. “Llegó dos años y unos 20.000 millones de dólares demasiado tarde”, dijo Abbott.

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