Tessa Romero, una mujer de 50 años residente en Málaga, España, asegura haber vivido una experiencia cercana a la muerte luego de que su corazón se detuviera durante 24 minutos. Su testimonio ha generado gran interés, pues afirma haber sentido una paz absoluta y una desconexión del mundo físico durante ese tiempo.

Todo ocurrió una mañana mientras dejaba a sus hijas en la escuela. De repente, una sensación extraña la invadió, seguida de un desvanecimiento total. Su corazón dejó de latir y, según los médicos, estuvo clínicamente muerta durante casi media hora.

Mientras el equipo de emergencias luchaba por reanimarla, Romero experimentó lo que describe como un viaje fuera de su cuerpo. “Sentí un alivio inmenso, como si todo el dolor y el sufrimiento hubieran desaparecido”, relató.

Durante esos minutos, Tessa asegura haber flotado sobre su propio cuerpo, observando cómo los médicos intentaban salvarla. Aunque nadie podía verla ni escucharla, ella se sentía completamente consciente y en paz.

Al despertar, su percepción de la vida cambió radicalmente. “Siempre fui escéptica sobre estos temas, pero ahora sé que lo que viví no fue un sueño ni una alucinación”, declaró. Desde entonces, su temor a la muerte desapareció por completo, considerándola más como un paso a otra realidad que como un final absoluto.

Tessa no es la única con este tipo de vivencias. Kevin Hill, un hombre de 55 años, también describió una sensación similar tras haber sido declarado clínicamente muerto y luego reanimado. “No sentía miedo, solo paz”, afirmó.

Las experiencias cercanas a la muerte siguen siendo un misterio para la ciencia. Mientras algunos investigadores las atribuyen a reacciones del cerebro en momentos críticos, otros creen que podrían ser una prueba de algo más allá de lo físico.

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