A medida que se acerca la apertura total de las fronteras cubanas las autoridades de esta nación recuerdan los nuevos protocolos a seguir al ingresar al país.

El régimen de la isla, espera una avalancha de al menos 100 mil visitantes en los dos últimos meses del año, cuyo ingreso generado vendría a engrosar sus arcas, diezmadas tras casi dos años de epidemia de coronavirus.

Sobre las nuevas medidas, expuso en conferencia de prensa esta semana, el ministro cubano de Turismo, Juan Carlos García Granda que a partir del 7 de noviembre próximo, Cuba eliminará la cuarentena obligatoria de los viajeros internacionales al arribo al país,

El titular anunció también que desde el 15 de noviembre, fecha establecida para la apertura de fronteras en la mayor de las Antillas, la realización de PCR (Reacción en Cadena de la Polimerasa) a la llegada al territorio nacional también será suspendida.

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Ahora, se exigirá entonces que todos los viajeros presenten o bien un pasaporte de salud o un certificado internacional anti-COVID-19 de aquellas vacunas certificadas por las agencias regulatorias correspondientes.

En el caso de quienes no cuenten con ninguno de los dos, tienen la obligación de presentar un PCR negativo con no más de 72 horas antes de viajar, realizado en un laboratorio certificado.

Por otro lado, García Granda explicó que los niños menores de 12 años de edad estarán exentos de presentar un esquema de vacunación o prueba de PCR.

Algo muy importante de aclarar, es el tratamiento que se le dará a los cubanos residentes en la isla que entren a la nación después de la señalada fecha: “En el caso de los cubanos residentes en el país, se restablece la obligatoriedad de presentarse en el consultorio del médico de familia o área de salud en un período no mayor de 48 horas de su arribo”.

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