El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este martes que el mandatario ucraniano, Volodímir Zelensky, tiene una invitación abierta para regresar a la Casa Blanca, dejando atrás las tensiones de su último encuentro en febrero. Además, anunció que planea hablar con el presidente ruso, Vladímir Putin, esta semana, en un intento por avanzar en las negociaciones de paz en el conflicto entre Rusia y Ucrania.
Durante una conferencia de prensa en los jardines de la Casa Blanca, Trump fue consultado sobre la posibilidad de recibir nuevamente a Zelensky. “Por supuesto”, respondió sin titubeos, marcando un contraste con la frialdad que caracterizó su reunión anterior. Esta declaración se da luego de que el Gobierno ucraniano aceptara una propuesta de Washington para declarar una tregua de 30 días, tras una reunión con una delegación estadounidense en Arabia Saudita.
El acuerdo entre Washington y Kiev contempla el restablecimiento de la asistencia militar estadounidense a Ucrania, que había sido suspendida por la administración Trump como estrategia de presión para forzar a Zelensky a negociar con Rusia. Según el mandatario estadounidense, lo pactado este martes en Yeda marca una “gran diferencia” con respecto al último encuentro con Zelensky, en el que lo acusó de no estar realmente comprometido con la paz.
El pacto no solo establece la tregua, sino que también incluye un compromiso para la explotación conjunta de recursos minerales en territorio ucraniano, lo que, según el documento firmado por ambas partes, brindará garantías de “prosperidad y seguridad a largo plazo” para Ucrania y permitirá a Estados Unidos recuperar parte del dinero invertido en asistencia militar desde el inicio del conflicto.
A pesar del avance en las negociaciones con Ucrania, el éxito de la tregua aún depende de la respuesta del Kremlin. Trump expresó su esperanza de que Putin acepte la propuesta para detener temporalmente los enfrentamientos. “Lo más importante es que Ucrania ya aceptó un alto el fuego. Ahora tenemos que hablar con Rusia y esperar que, con suerte, el presidente Putin también lo acepte. Así podremos poner esto en marcha”, declaró.
El intento de mediación de Trump se produce en un contexto de incertidumbre sobre el futuro de la guerra y el rol de Estados Unidos en ella. Con su estrategia de condicionar la ayuda militar, el presidente ha buscado presionar tanto a Ucrania como a Rusia para encontrar una salida negociada al conflicto. Sin embargo, la efectividad de esta táctica aún está por verse, ya que la decisión final sobre la tregua recae en el Kremlin.
La reunión en Yeda también sirvió para restablecer las relaciones entre Washington y Kiev, que se habían deteriorado tras el enfrentamiento público entre Trump y Zelensky en la Casa Blanca el pasado 28 de febrero. Aquel episodio, en el que el líder ucraniano se mostró desafiante ante las exigencias de su homólogo estadounidense, puso en duda el nivel de cooperación entre ambos países.
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