La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zajárova advirtió hoy que su país podría tomar severas medidas en represalia si Suecia y Finlandia se unen a la OTAN.
La alta funcionaria rusa señaló que de producirse esa adhesión habrían “graves consecuencias militares y políticas”.
"Todos los Estados participantes de la OSCE a título nacional, incluidos Finlandia y Suecia, reafirmaron el principio de que la seguridad de algunos Estados no debe construirse a expensas de la seguridad de otros países. Es evidente que la adhesión de Finlandia y Suecia a la OTAN, que es principalmente, como bien entienden, un bloque militar, tendría graves consecuencias militares y políticas que requerirían que nuestro país tome medidas recíprocas", dijo Zajárova durante sesión informativa.
Finlandia y Suecia, que no son miembros de la OTAN, fueron invitados por el secretario general de, Jens Stoltenberg de la organización a participar en la cumbre virtual de emergencia de la alianza este 25 de febrero que giró por supuesto sobre la situación en torno a Ucrania.
Por su parte, Sanna Marin, primera ministra finlandesa, señaló en una reunión parlamentaria que “su país está listo para solicitar el ingreso en la OTAN si surge una amenaza a su seguridad nacional”.
La organización ha respondido como se esperaba con un movimiento de tropas. Stoltenberg anunció el despliegue de elementos de su Fuerza de Respuesta, la cual dispone de hasta 40.000 efectivos, en la parte este de la Alianza.
El presidente de Ucrania Vladimir Zelensky fue categórico en su discurso al mundo durante el segundo día de las hostilidades: "La invasión de Rusia en Ucrania no es sólo una invasión, es el comienzo de la guerra contra Europa", afirmó.
En el segundo día de ataques a Ucrania, los ciudadanos de ese país se arman para apoyar al ejército.
El asesor del jefe de la oficina del presidente de Ucrania Mikhajlo Podolâk dijo hoy en una reunión informativa que las Fuerzas Armadas de Ucrania, la Policía Nacional y la Defensa Territorial trabajan bien y mantienen el control sobre “gran parte del territorio ucraniano” que ha sido atacado por Rusia.
El alto cargo militar argumentó que las fuerzas rusas buscan presionar a los ciudadanos y están atacando a civiles, han atacado conjuntos habitacionales residenciales, y se reportaron bombardeos en un jardín de infancia.
Podolyak informó también que la situación más difícil se encuentra ahora en la dirección de Járkov, en la región de Sumy y en el sur del país, donde hay batallas bastante graves entre las Fuerzas Armadas y las tropas rusas.
El primer ministro ucarniano Denis Shmigal hizo un llamado a todos los países a introducir un embargo a los productos petrolíferos de la Federación de Rusia, prohibir la entrada de ciudadanos rusos en su territorio e inhabilitar a Rusia de SWIFT.
Asimismo instó a la OTAN, Europa y EE.UU. a cerrar el cielo sobre Ucrania: “esto no significa un enfrentamiento militar con Rusia, significa que detuvieron la guerra, y los descendientes te recordarán como héroes. Nosotros por nuestra parte seguiremos defendiendo nuestra propia tierra, no nos rendiremos y destruiremos a nuestros enemigos", señaló.
Por su parte, el ministro de Defensa de Polonia, Mariusz Błaszczak confirmó en redes sociales el envío de un convoy con municiones a Ucrania, convirtiéndose en la primera ayuda militar reconocida públicamente desde el inicio del ataque: “El convoy con las municiones que entregamos a Ucrania ya ha llegado a nuestros vecinos. Apoyamos a los ucranianos, nos solidarizamos y nos oponemos firmemente a la agresión rusa", escribió en Twitter.
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