El periodista de la revista Alma Mater, Armando Franco, quien dirigió durante un breve periodo esa publicación oficialista antes de ser expulsado por la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), pasó a ocupar un importante puesto dentro del estatal Grupo Empresarial PALCO.
Franco es el nuevo director de Mercadotecnia y Comunicación de PALCO y apuesta por un grupo “más cercano a sus clientes y socios, atemperado a las dinámicas de los tiempos actuales”, según expone una publicación en redes sociales de la entidad.
“Preparados y dispuestos a asumir con total responsabilidad todos los retos del Grupo. Con esta publicación, terminamos la presentación de nuestros seis directores funcionales”, dice PALCO este domingo.
De acuerdo con la descripción de su sitio web, el Grupo Empresarial Palco “es una Organización que se caracteriza por la exclusividad en la atención y prestación de Servicios Integrales al Gobierno, sus invitados y Cuerpo Diplomático, la organización de Congresos, Ferias y Exposiciones nacionales e internacionales, y una diversidad sostenida de ofertas al cliente, avaladas por la especialización y profesionalidad de sus Empresas y el desempeño profesional de sus directivos y trabajadores”.
Su objetivo —dice— consiste en “organizar, desarrollar y brindar de forma integral, servicios diversos y especializados, que aseguren las misiones asignadas, a personalidades invitadas por el gobierno, Cuerpo Diplomático, participantes en congresos y ferias, empresas cubanas y extranjeras; sustentado en la alta profesionalidad, los valores éticos – morales y la hospitalidad de sus trabajadores”.
En junio de 2021, el medio independiente CiberCuba publicó un artículo revelando la destitución de Abraham Maciques Maciques, hombre de confianza de la cúpula castrista, como presidente de PALCO. Un funcionario comentó entonces que el cambio respondía a una remodelación del grupo estatal, que, a partir de ese momento solo gestionaría supuestamente el Palacio de Convenciones de La Habana, cediendo el resto de sus empresas a al conglomerado militar GAESA, administrado por las FAR.
Después de ser expulsado de Alma Mater, el joven periodista Armando Franco confesó que tenía planes de dejar la revista, sin embargo, cuestionó la aparentemente precipitada decisión de la UJC.
“La dirección de la UJC estaba al tanto de mis planes de dejar AM después del centenario de la revista el próximo noviembre, cuando cumpliría tres años como director. Para ello, ya habíamos iniciado una serie de transformaciones en las dinámicas de funcionamiento y la conformación del equipo que garantizarían continuidad llegado ese momento. Solo faltaban cinco meses”, dijo.
La secretaria de la UJC, Aylin Álvarez, comentó que la expulsión era parte de un proceso de “renovación natural”, pero Franco lo puso en duda. “No parece renovación natural un proceso que no incluyó ni ubicación laboral para mí ni un director para AM, que no garantizó el trabajo de la revista tras la liberación. Resulta incoherente realizar cambios en AM por razones "naturales", mientras la editora vive una crisis de directivos y periodistas”, sostuvo.
“En los próximos días, semanas, meses, cada uno escogerá su camino dentro o fuera del periodismo cubano. Yo solo aspiro a volver a creer, a encontrar razones para seguir intentando”, aseveró entonces. El joven había levantado interrogantes tras aparecer públicamente en el desfile del 1 de mayo en la Plaza de la Revolución el año pasado.