Superioridad cubana y errores brasileños marcan el reestreno del técnico Bernardinho en el Maracanãzinho
La afición brasileña llenó el Maracanãzinho con esperanza, pero fue la selección cubana la que brilló en el debut de la Liga de Naciones masculina de voleibol. Cuba demostró su superioridad durante la mayor parte del encuentro y le infligió una derrota a Brasil, haciendo del reestreno de Bernardinho como técnico de la selección verde y amarilla un evento memorable. Con una impresionante actuación en el ataque, los cubanos ganaron por 3 sets a 1 – parciales de 25/23, 27/29, 25/21 y 25/21. A pesar del revés para Brasil, Leal fue el máximo anotador del partido, con 19 puntos.
Con esta victoria, Cuba se posiciona favorablemente en la tabla. Aunque Bernardinho advierte que es solo el comienzo y que usará la Liga de Naciones como preparación para los Juegos Olímpicos, el desempeño cubano ha sido notable. Consulta la clasificación de la VNL masculina aquí.
El encuentro comenzó con un Brasil lento y con muchos errores de saque, mientras que Cuba, motivada por su lucha por un lugar en los Juegos Olímpicos de París, se mostró decidida y constante. La selección cubana cerró el primer set con un 25 a 23. La segunda parte del juego estuvo más equilibrada, con Brasil liderando en gran parte gracias al buen desempeño de Leal. Sin embargo, la determinación de Cuba se impuso, logrando una remontada y llevándose el set por 29 a 27.
Desde ese punto, Cuba dominó completamente el juego. Con una amplia ventaja desde el inicio del tercer set, los cubanos administraron bien su posición y ganaron 25 a 21. Aunque el último set comenzó de manera equilibrada, la capacidad de los cubanos para mantener la presión fue evidente. Inspirados, jugadores como Yant, López, Sánchez, Concepción y Simón guiaron a su equipo hacia una victoria final de 25 a 21.
El desempeño de la selección cubana no solo destaca su habilidad y cohesión como equipo, sino también su determinación para superar a uno de los equipos más fuertes del voleibol internacional. Esta victoria marca un comienzo prometedor para Cuba en la Liga de Naciones.