Un delincuente identificado como Bryan López irrumpió en una casa en el Vedado, rompió el tranque de seguridad del timón de una bici-moto eléctrica y cuando la estaba sacando de la vivienda, fue sorprendido in fraganti por el jefe de sector de la Policía. El malechor irrumpió en una vivienda ubicada en calle G, entre 13 y 15, en el Vedado y tras romper el seguro y salía tranquilamente de la casa, fue atrapado afortunadamente, según información publicada en Facebook por el usuario Javier Gutiérrez, en uno de los tantos perfiles vinculados al régimen.
La nota afirma que el jefe de sector de la PNR estaba haciendo su “recorrido habitual” en esa zona del municipio Plaza de la Revolución, cuando vio salir de la vivienda a López con el vehículo robado. No se precisó en qué fecha ocurrió el incidente ni cómo supo que era robada la moto. En un tono sarcástico, que suele ser habitual en este tipo de perfiles en redes que buscan ensalzar a la Policía cubana, la publicación comentó que, “sin chistar”, al ladrón “se lo llevaron para su nuevo hogar, donde no le tendrá que importar el transporte”.
Igualmente, celebró el incidente como “otra victoria para las autoridades y otro bien recuperado” y advirtió, con triunfalismo: “Así se debe de hacer siempre, chapear bajito al delito, las ilegalidades y todo el que esté envuelto en malos pasos, pues el pueblo lo necesita y tampoco tolerará la impunidad del delito ni la tolerancia a los malhechores”.
No obstante, la publicación no pone en contexto el suceso, que lejos de ser éste un hecho aislado y casual, desafortunadamente se ha vuelto parte de la cotidianidad en Cuba, donde a diario se reportan robos, asaltos y crímenes violentos hasta homicidios, que mantienen en vilo a la ciudadanía.
Ante el incremento de la delincuencia y la inseguridad, la población ha cuestionado la falta de acción e ineficiencia de los oficiales de policía, como ocurrió con el robo de un caballo en una finca del reparto El Caney, en Santiago de Cuba, el viernes pasado por la madrugada. Residentes de la zona capturaron al ladrón, solo para que los policías lo liberaran pocas horas después.
Es frecuente que los vecinos de los lugares donde se cometen robos actúen por cuenta propia para capturar a los delincuentes y entregarlos a las autoridades, aunque sin garantías de que los mantengan detenidos y que sean procesados por la justicia, como corresponde.
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