La española Laura Méndez quien estuvo de visita en Cuba, junto a la también influencer Rosa Martorell terminó bajo un acto de “reafirmación revolucionaria” de dos ancianos cubanos al intentar filmar una cola para comprar pan.
Méndez llegó con su celular filmando una bodega y explicando que la cola en el sitio era para comprar un solo tipo de pan racionado por la libreta de abastecimiento.
Pero cuando estaba haciendo su video fue abordada por dos ancianos cubanos que pedían se llamara a la policía para que la detuvieran.
“A qué viniste, a comer mierda” , le reclamaron las dos personas enardecidas que advertían a la joven no tener derecho a filmar la cola.
La influencer dijo que buscaba mostrar la verdad de Cuba, y terminó recibiendo una retahíla de regaños de los ancianos y hasta una arenga de “patria o muerte, venceremos”.
Las visitas de estos comunicadores a Cuba representa una alternativa de mostrar otra cara de la isla al mundo.
En un lenguaje sencillo y desde la perspectiva de su lente los influencers muestra la realidad tal y como la perciben.
La influencer española Rosa Martorell (iamrousmary) estuvo también en la isla y compartió con sus seguidores las impresiones que se llevó y cuestionó desde lo vivido “cómo los habitantes de la isla podían soportar una vida diaria tan compleja”.
“Yo no sé aquí la gente cómo vive. Es decir... es imposible”, dijo la comunicadora.
“Aquí en Cuba hay escasez de todo. Es prácticamente imposible encontrar agua para beber en los sitios. Tienes que ir preguntando a la gente de las casas para que te consigan agua”, comentó muy afectada.
Martorell agregó que para muchos españoles defensores del socialismo sería bueno pasar un tiempo en la isla y conocer de primera mano lo que allí sucede.
“El socialismo no puede ser bueno en ninguna de sus formas, ya sea en España o en Cuba”, advirtió en una directa.
La comunicadora también quedó impresionada con las grandes diferencias entre algunos hoteles y las condiciones en que vive el ciudadano común.
En febrero pasado, la influencer española Silvia Castel, que emprende un proyecto de turismo low-cost llamado "Cualquier destino", también visitó Cuba.
“No es fácil describir lo que no ve la cámara, lo que no se puede plasmar en una foto. No es fácil retransmitir las palabras de lo que comparten con nosotros, lo que nos cuentan, la verdadera vida aquí”, relató en apuntes posteriores tras su visita.
Algo que afectó a la joven fue el conocer la dualidad cambiaria en la isla, donde existe a dos niveles, la pauta oficial y la de la calle. Ella se manifestó como muy sorprendida por los malabares de los cubanos para acceder a las tiendas en Moneda Libremente Convertible (MLC), cuando el salario que perciben es en pesos cubanos.
“¿Dónde se ha visto un país que para comprar en un supermercado necesites una moneda extranjera? A mí me explota la cabeza solo de pensarlo”, dijo en sus redes sociales.
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