Sin dudas, Ana de Armas es la actriz cubana del momento, después del exitoso debut del filme “Blonde” en el Festival de Cine de Venecia, donde la joven de 34 años interpreta a la icónica celebridad de Hollywood, Marilyn Monroe.
Los aplausos y comentarios elogiosos no han parado, incluyendo de celebridades que defendieron su actuación ante las críticas por su acento en el rol de la artista estadounidense. Una de las personalidades que reaccionó al éxito de la joven fue una importante y memorable figura de la televisión y el cine cubanos, Susana Pérez.
“No importa que la critiquen, yo como cubana y como actriz me siento muy orgullosa de donde ha llegado y la respuesta que dio es perfecta. Bravo, Ana de Armas. Te lo has currado bien y te lo mereces”, escribió la popular artista de la isla, radicada hoy en Miami, al comentar sobre la rueda de prensa de la película en el Festival de Cine de Venecia.
En la conferencia, Ana de Armas habla visiblemente emocionada de lo que representó para ella el papel y la cinta sobre Marilyn Monroe. “Hice esta película para ver hasta dónde podía llegar, pensé que era un regalo a mí misma, no la hice para que otra gente cambie su opinión sobre mí. Esta película me ha cambiado la vida”, expresó.
Tras el estreno del largometraje en el célebre festival, De Armas recibió una ovación de pie del público, que se extendió por 14 minutos. La prensa especializada la calificó como la aclamación más larga que se ha visto por una película en dicho evento. El récord de 13 minutos lo tenía The Banshees of Inisherin, protagonizada por Brendan Gleeson y Colin Farrell.
Blonde es un filme dirigido por Andrew Dominik, un drama biográfico basado en la novela homónima de Joyce Carol Oates. En el estreno de la conocida ciudad italiana estuvieron otras celebridades como el actor Adrien Brody, coprotagonista de la película, y Brad Pitt, uno de los productores.
Los avances habían generado algunas críticas por el acento de la cubana, sin embargo, su interpretación fue defendida por el propio Brad Pitt, quien reconoció el gran papel de De Armas a pesar del reto que suponía un personaje semejante. La película reinventa la vida de Monroe, desde su infancia volátil como Norma Jeane hasta su ascenso al estrellato.
"No dudé ni un segundo. Nadie tiene derecho a dudar de un regalo así. Eres actriz y te pasas la vida deseando que una cosa así te ocurra a ti en vez de a los demás. Recuerdo perfectamente el momento en que la película salió finalmente adelante”, dijo la cubana en una entrevista.
“Recuerdo más el dolor, el desgarro que sentí de que se me escapaba un sueño que la alegría de haberlo conseguido luego. Se diría que me he pasado años aterrada y al mismo tiempo eufórica. Contenta por lo que tenía y muerta de miedo por la responsabilidad. ¡Que yo, que no he nacido en Estados Unidos, sea el mayor icono de Norteamérica!”, expresó.
La joven también habló de cómo se relacionaba actualmente con la fama que había logrado. “No es algo que esperaba que sucediera o que buscaba. Nunca ha sido un plan. Quiero creer que lo que ocurre ahora es el resultado de un buen trabajo. Como alguien dice en la película, siempre tienes un yo privado y un yo público. Si no te impones un límite y sólo te ofreces y te ofreces, acabas por quedarte sin nada. Te vacías. Aprendamos de las lecciones de Marilyn”, comentó.
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