La Habana vivió una madrugada tensa y alarmante cuando, a la 1:15 a.m., un ómnibus de la ruta P7 (715), que cubre el trayecto desde la Confronta (C.F.) hacia El Cotorro, sufrió un lamentable accidente.

Según informes preliminares, el incidente ocurrió luego de que el chofer fuera agredido físicamente por varios individuos justo al salir de una parada. Como resultado de la agresión, el conductor perdió el control del vehículo, el cual terminó impactando violentamente contra una vivienda ubicada en la intersección de Calzada de Luyanó y Ensenada, en el municipio 10 de Octubre.

A pesar de lo aparatoso del siniestro, no se reportaron víctimas fatales ni personas lesionadas, lo cual ha sido considerado un alivio dadas las circunstancias. No obstante, los daños materiales fueron significativos tanto en la infraestructura de la vivienda como en el propio ómnibus.

La Policía ha iniciado las investigaciones correspondientes tras asegurar el área. El equipo técnico de Alberro se movilizó para rescatar el vehículo accidentado, logrando recuperar la unidad con la intención de que pueda volver a operar lo antes posible.

Este suceso pone en evidencia la vulnerabilidad de quienes trabajan en el transporte público y la urgente necesidad de garantizar su seguridad, así como la de los pasajeros. Agredir a un chofer en funciones no solo pone en riesgo su vida, sino también la de todos los ocupantes del vehículo y las personas en el entorno.

La comunidad ha expresado su preocupación y solidaridad ante el hecho, al tiempo que se han levantado voces en redes sociales pidiendo más medidas de protección y conciencia ciudadana.

Este incidente debe servir como un llamado de atención: cuidar a nuestros transportistas es responsabilidad de todos. Compartir esta historia puede ayudar a crear conciencia y fomentar el respeto y la seguridad en nuestros espacios públic

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