Un nuevo video protagonizado por Sandro Castro, nieto del expresidente cubano Fidel Castro, circula en redes sociales, desatando reacciones diversas entre los usuarios.

En el material audiovisual, se observa al joven lanzando frases desconectadas y altamente llamativas, en un tono exaltado y acompañado por varias personas.

Entre las expresiones pronunciadas por Sandro se encuentran: “¡Démelo! ¡Démelo! ¿Qué me hace?”, “¡Denle candela!”, “¡A mí dame gasolina para quemarme como Daddy Yankee!” y “¡Liberen al diablo! ¡Libérenlo!”. También alude a frases populares como “¡A ella le gusta la gasolina!” e incluso realiza afirmaciones como “¡Yo soy su dios!” o “¡Que sepa que si me quemas acabará para siempre la cristal”.

El video, aparentemente grabado en un ambiente de naturaleza, muestra a Sandro en actitud alterada y con evidentes cambios de estado emocional.

También menciona productos como té verde, jugo de manzana y hace referencia a una supuesta “fórmula”, sin aclarar a qué se refiere exactamente.

No está claro si las imágenes corresponden a una sola vez o a momentos distintos recopilados en una edición posterior.

La difusión del contenido generó una oleada de reacciones en plataformas como Facebook, Instagram, TikTok y X (antes Twitter), donde internautas expresaron sorpresa, burlas y preocupaciones por el comportamiento del nieto del histórico dirigente cubano.

Sandro Castro ha sido anteriormente centro de controversias públicas por exhibir lujos y comportamientos que contrastan con el discurso oficial de igualdad y modestia promovido por las autoridades cubanas.

En el pasado, publicaciones suyas en autos de alta gama o en ambientes exclusivos también generaron amplias discusiones en la esfera pública digital.

Hasta el momento, ninguna fuente oficial ha comentado sobre el nuevo video ni sobre el estado actual de Sandro Castro.

Tampoco ha habido pronunciamientos públicos por parte de su familia o de instituciones estatales relacionadas con el contenido difundido.

El episodio se suma a una serie de apariciones que mantienen al joven en el centro de la atención mediática, especialmente en contextos de fuerte presencia de usuarios cubanos en redes sociales, donde temas vinculados a figuras del poder despiertan un interés creciente.

Fuente Maripili del Pino

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