William Levy —identificado legalmente como William Gutiérrez— quedó sin cargos y sin antecedentes penales en el condado de Broward, Florida, tras culminar con éxito el Misdemeanor Diversion Program (MDP), una vía alternativa pensada para infractores primerizos. La Oficina del Fiscal confirmó que, una vez satisfechos los requisitos, fueron desestimadas las acusaciones por intoxicación en público, alteración del orden y traspaso sin permiso.

La elegibilidad del actor estuvo sustentada en su condición de primer infractor. “Al ser un primer infractor, el acusado fue elegible para ingresar al programa, el cual completó exitosamente. En todos los casos con víctimas registradas, no se permite la admisión al programa sin el consentimiento previo de la víctima”, explicó Paula McMahon, directora de comunicaciones del fiscal Harold F. Pryor, citada por la prensa local. Y sobre el espíritu del MDP añadió: “Este programa da una segunda oportunidad a quienes aceptan responsabilidad por sus actos y buscan rehabilitación. Si no cumplen, el caso regresa a la corte para ser procesado”.

Según los documentos judiciales, Levy cumplió todas las condiciones: curso de control de ira; curso de manejo del alcohol; horas de servicio comunitario; supervisión por la División de Libertad Condicional del Sheriff de Broward y pago de costos administrativos. El cierre formal quedó registrado el 29 de septiembre, fecha en la que se entregó el informe final al tribunal.

En una breve audiencia en la Corte Civil de Broward, su abogada Regina Tsombanakis presentó la documentación ante la jueza Melinda Brown, quien declaró el caso cerrado por “cumplimiento exitoso del programa”. Así, Levy no enfrentará consecuencias adicionales, no tendrá que cumplir probatoria y su expediente queda archivado como “caso cerrado por cumplimiento exitoso del programa”.

El episodio legal comenzó en abril, cuando el actor fue arrestado en el restaurante Baires Grill (Weston, Florida) tras un altercado. Pasó cerca de 24 horas detenido y, en un inicio, se declaró inocente y pidió el registro de las cámaras de seguridad con miras a un juicio con jurado. Luego de varias comparecencias —algunas a través de su abogada—, en la audiencia del 26 de junio se acogió al MDP. Ese día, la jueza Brown le ofreció un programa de tres o seis meses; Levy optó por el plazo más corto con la condición de presentarse en persona antes del 30 de junio para firmar el compromiso, requisito que cumplió en la fecha límite. Desde entonces, permaneció bajo supervisión y completó los cursos y obligaciones que hoy le permiten dar por concluido el caso.

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