¿Vuelve Habana Blues? Roberto San Martín revela una inesperada propuesta de secuela
Redacción de CubitaNOW ~ viernes 18 de julio de 2025

Durante una reciente entrevista en el programa Esto no es un podcast, el actor cubano Roberto San Martín sorprendió al revelar que nunca tuvo una relación cercana con Alberto Yoel, su compañero de reparto en la aclamada película Habana Blues (2005). Aunque la química entre sus personajes, Ruy y Tito, fue clave en la trama, fuera de cámara la relación fue meramente profesional.
“Él estaba disfrutando su película y yo veía que esa era mi oportunidad para salir de Cuba”, confesó San Martín, subrayando que ambos actores vivían momentos vitales distintos durante el rodaje. Según relató, tras finalizar la filmación coincidieron en contadas ocasiones y no mantuvieron contacto durante años… hasta que una llamada reciente lo tomó por sorpresa.
Alberto Yoel lo contactó para proponerle la idea de una segunda parte de Habana Blues, una película que, con el paso del tiempo, se ha convertido en obra de culto para generaciones de cubanos, dentro y fuera de la Isla.
La cinta, dirigida por Benito Zambrano y coproducida entre España y Cuba, narró el dilema de dos músicos habaneros que enfrentan el choque entre crear desde la autenticidad o adaptarse a las demandas del mercado para alcanzar proyección internacional. La historia, acompañada por una potente banda sonora, se convirtió en un himno sobre la identidad, la migración y los sacrificios personales.
El posible regreso de Ruy y Tito ha encendido las redes sociales.
“La segunda parte la necesitamos. He visto esa peli más de 30 veces”, escribió un entusiasta seguidor. Otros, sin embargo, se muestran más escépticos: “No lleva segunda parte. Se dijo todo lo que se debía decir con esa película.”
Por ahora, ni el director Benito Zambrano ni otros miembros del equipo han confirmado una secuela. Tampoco se conocen detalles sobre el guion, el elenco ni una posible fecha de producción. Aun así, el simple hecho de que los protagonistas estén en conversaciones ha bastado para reabrir el debate sobre el impacto de Habana Blues y su posible evolución narrativa.
¿Qué pasaría con Ruy y Tito dos décadas después? ¿Habrán logrado mantener su integridad artística? ¿O el desarraigo, la adaptación y el tiempo habrán modificado sus caminos? La secuela, de producirse, podría ofrecer respuestas, pero también nuevos interrogantes sobre la Cuba contemporánea, la diáspora y la supervivencia del arte.
Mientras tanto, el legado de Habana Blues permanece intacto. La película no solo marcó a una generación, sino que también planteó conflictos que hoy siguen siendo profundamente actuales. La posibilidad de una segunda parte, aunque incierta, revela cuánto caló su mensaje en quienes aún tararean sus canciones o se ven reflejados en sus dilemas.