La Unidad 5 de la termoeléctrica "Antonio Maceo", conocida popularmente como Renté, ubicada en Santiago de Cuba, salió del sistema eléctrico este miércoles por la tarde debido a un “salidero en la estación de agua de alimentar”, según informó la Unión Eléctrica de Cuba.

La desconexión ocurrió a las 5:59 pm y, hasta el momento, no se ha precisado cuánto tiempo tardará la reparación ni el alcance de la afectación en la generación de energía.

Este incidente se produce en un contexto donde los apagones se han vuelto una constante en la Isla, afectando la rutina de miles de familias, la actividad económica y los servicios básicos. Vecinos de varias provincias han expresado su preocupación por la falta de información oficial sobre la magnitud del impacto, mientras que las redes sociales se llenan de denuncias y reclamos de la población.

Los especialistas aún evalúan el daño y los pasos necesarios para reincorporar la Unidad 5 al sistema eléctrico. Sin embargo, la ausencia de detalles sobre el diagnóstico y los plazos de reparación aumenta la incertidumbre sobre posibles apagones adicionales en Santiago de Cuba y otras zonas que dependen de esta central para abastecer el sistema nacional.

La termoeléctrica Renté es una de las más importantes de la región oriental de Cuba y su funcionamiento estable es clave para evitar interrupciones prolongadas del suministro eléctrico. Los salideros en las estaciones de agua son problemas críticos, pues comprometen la operación de las unidades y exigen mantenimiento especializado para evitar daños mayores a los equipos y a la infraestructura.

La población espera una respuesta rápida de las autoridades y un cronograma claro sobre la reparación de la unidad. Mientras tanto, la incertidumbre crece y la preocupación se refleja en la circulación de rumores sobre apagones masivos, aumentando la tensión entre los residentes que ya enfrentan limitaciones energéticas frecuentes.

En redes sociales, ciudadanos comentan la situación y comparten experiencias sobre cómo los cortes afectan la vida diaria, desde la preservación de alimentos hasta la atención médica y las labores educativas.

La avería en Renté vuelve a evidenciar los desafíos que enfrenta el país para garantizar un suministro eléctrico confiable y estable, poniendo sobre la mesa la necesidad de inversiones y mantenimiento constante en la infraestructura energética.

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