Un mar de orgullo, desfile multitudinario de la comunidad LGTB+, desafía a Orban en Budapest
Redacción de CubitaNOW ~ domingo 29 de junio de 2025

En una escena que desbordó expectativas, decenas de miles de personas llenaron las calles de Budapest este sábado en una Marcha del Orgullo transformada en un acto masivo de desobediencia civil contra el gobierno ultraconservador de Viktor Orban. Pese a la prohibición oficial, banderas arcoíris ondearon por todo el centro de la capital húngara, convirtiendo el evento en la mayor manifestación LGTB+ en la historia del país.
Los organizadores estimaron una asistencia cercana a las 200.000 personas, muy por encima del récord anterior de 35.000, desafiando abiertamente a un régimen que ha endurecido su ofensiva legal y cultural contra la diversidad sexual.
La marcha comenzó a las tres de la tarde frente a la alcaldía, decorada simbólicamente con los colores del arcoíris. "Estoy orgulloso de ser gay y tengo miedo de que el gobierno quiera humillarnos", dijo Zoltan, un hombre de 66 años que participaba por primera vez.
No estaba solo: cientos de miles coreaban mensajes de unidad, inclusión y rechazo a la represión. “Fue una experiencia formidable, muy distinta al odio que suele respirarse aquí”, comentó Marcell Szanto, estudiante heterosexual que acudió como aliado.
Aunque no hubo intervención directa de la policía, el gobierno colocó cámaras con reconocimiento facial a lo largo del recorrido y amenazó con multas y hasta un año de cárcel a organizadores y participantes.
"La masividad de la protesta dejó en evidencia el fracaso del gobierno en contener un movimiento que busca algo tan esencial como la dignidad humana", escribió el alcalde ecologista de Budapest, Gergely Karacsony, quien se negó a cancelar la marcha alegando que los eventos municipales no requieren autorización estatal.
Para la oposición, Orban “se marcó un gol en propia puerta”. La represión, lejos de intimidar, catalizó un despertar colectivo. Hasta eurodiputados y representantes de 33 países marcharon con los manifestantes, pese a las amenazas de represalias diplomáticas.
El gobierno húngaro, sin embargo, mantiene su ofensiva. En marzo, una nueva ley prohibió las marchas del Orgullo y se enmendó la Constitución para limitar derechos LGTB+, bajo el argumento de “proteger a los niños” de la “depravación”.
Estas medidas han sido duramente criticadas por Bruselas como una regresión sin precedentes en la UE. Para muchos húngaros, sin embargo, este sábado no fue solo una protesta por los derechos LGTB+, sino un símbolo de resistencia democrática. "No es solo sobre la gente gay, es por todos los derechos del pueblo húngaro", resumió Akos, un joven estudiante que viajó cientos de kilómetros para estar presente en la marcha.