Un avión modelo Airbus A320 operado por Azerbaijan Airlines (AZAL) sufrió un incidente en la madrugada del 20 de octubre de 2025 en el aeropuerto Aeropuerto de Púlkovo (ULLI), San Petersburgo, Rusia. El vuelo J2-020, que cubría la ruta entre San Petersburgo y Bakú, regresó al aeropuerto tras detectar un fallo en su tren de aterrizaje durante la aproximación.

El comandante, siguiendo protocolos de seguridad, decidió mantener la aeronave en el aire durante aproximadamente tres horas para quemar combustible antes de intentar el aterrizaje. Finalmente, el A320 tocó pista a las 04:43 (hora de Bakú) y durante el rodaje se salió ligeramente de la pista, deteniéndose en una zona de césped adyacente a la misma.

A bordo iban 155 pasajeros más tripulación.

Ninguna persona sufrió lesiones durante el incidente y todos fueron evacuados sin complicaciones. La aerolínea ya dispone de una aeronave de sustitución para transportar a los pasajeros hasta su destino.

Las primeras versiones apuntan a un fallo en el tren de aterrizaje como razón principal del desvío; AZAL lo declaró oficialmente como “un problema técnico relacionado con el tren de aterrizaje”. El aeropuerto activó sus servicios de emergencia y rescate en plena operación para garantizar la seguridad del aterrizaje.

Las autoridades rusas y la aerolínea han abierto una investigación conjunta para determinar las causas exactas del incidente, los protocolos seguidos y los posibles daños en la aeronave antes de su regreso al servicio. Mientras tanto, el avión involucrado ha sido retirado temporalmente para inspección técnica detallada.

Este suceso resalta una vez más la importancia de los procedimientos de seguridad en la aviación comercial, así como la capacidad de la tripulación para actuar con calma y profesionalismo ante una emergencia. Afortunadamente, lo que pudo convertirse en una tragedia terminó sin víctimas, lo que permite poner el foco en aprender del incidente para prevenirlo en el futuro.

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