El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reiteró, en un discurso pronunciado la víspera, que ``Estados Unidos nunca será un país socialista”.

“EE.UU. se fundó con libertad e independencia, no bajo la coerción, dominación y control del Gobierno, y seguiremos libres. Esta noche, renovamos nuestra determinación de que EE.UU. nunca será un país socialista”, dijo el mandatario.

“Condenamos la brutalidad del régimen de Maduro, cuyas políticas socialistas han convertido a esa nación de ser una de las más ricas de Sudamérica a un Estado de pobreza y desesperación”, argumentó Trump.

“Coincidiendo con el 200 aniversario del nacimiento de Karl Marx, el socialismo está viviendo un regreso en el discurso político estadounidense. Propuestas políticas detalladas de autodenominados socialistas están ganando apoyo en el Congreso y entre mucho del electorado”, dijo, por su parte, la Casa Blanca, en un documento publicado semanas antes de las elecciones legislativas de noviembre pasado.

Según Cubanet, “el documento, elaborado por el Consejo de Asesores Económicos (CEA, en sus siglas en inglés) del Gobierno de EE.UU., llevó el título de “Los costes de oportunidad del socialismo”.

“Entre las propuestas que analizó está la sanidad pública universal, que aunque está lejos de formar parte del debate de la opinión pública empezó a ganar adeptos tras el impulso dado por progresistas como el senador Bernie Sanders, exaspirante a la candidatura demócrata en las elecciones presidenciales de 2016”, concluyó el portal.

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