El senador cubanoamericano Bob Menéndez criticó la mayoría de las nuevas medidas de la administración Biden hacia Cuba, anunciadas el lunes, asegurando que estas podían “enviar el mensaje equivocado a las personas equivocadas”.

Menéndez, presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, expresó su incredulidad acerca de los planteamientos de la Casa Blanca sobre la utilidad de las medidas para alcanzar la democracia en Cuba y poner fin al régimen comunista de La Habana.

Según el funcionario demócrata, la administración Biden “corre el riesgo de enviar el mensaje equivocado a las personas equivocadas, en el momento equivocado y por todas las razones equivocadas” tras la represión ordenada por el gobierno de Miguel Díaz-Canel contra los manifestantes del 11 de julio de 2021.

Declaraciones del Senador Menéndez sobre cambios en la política de los Estados Unidos hacia Cuba: pic.twitter.com/9OMUKW7ZAG

— Senate Foreign Relations Committee (@SFRCdems) May 17, 2022

“Estoy muy perturbado luego de enterarme de que el gobierno de Biden autorizará viajes en grupo a través de visitas que siempre han sido equivalentes a turismo regular”, expuso. “Para ser claros, aquellos que todavía creen que el aumento de los viajes generará democracia en Cuba están simplemente en un estado de negación”, enfatizó.

“Durante décadas, el mundo ha estado viajando a Cuba y nada ha cambiado. Durante años, Estados Unidos alivió tontamente las restricciones de viaje con el argumento de que millones de dólares estadounidenses traerían la libertad y nada cambió”, aseguró el senador.

“El régimen cubano ha tratado por décadas de sacarle provecho a las propiedades que les confiscó a miles de cubanos y cubanoamericanos. Al debilitar la responsabilidad legal de las empresas que hacen negocios con el régimen cubano para utilizar estas propiedades, es cada vez más probable que estas empresas extranjeras sigan traficando con propiedades robadas sin consecuencia alguna”, afirmó.

Por otro lado, Menéndez celebró la disposición de Washington de mantener la lista restricciones del Departamento de Estado donde incluye entidades cubanas asociadas a la cúpula militar del régimen, advirtiendo que EE.UU. debe “tomar medidas significativas para impulsar la desmilitarización de la economía cubana”.

“También doy la bienvenida a la decisión de la administración para reiniciar el Programa Cubano de Parole de Reunificación Familiar, un paso muy necesitado para fortalecer los lazos entre las familias cubanas en la isla y en Estados Unidos”, sostuvo.   

“Durante más de 60 años, las mareas del romanticismo hacia Cuba han ido y venido, pero siempre han chocado con fuerza contra las rocas de la realidad”, advirtió Menéndez, opinando igualmente que Estados Unidos necesitaba “dejar en claro que mediremos nuestro éxito en la libertad y los derechos humanos y no en el dinero y el comercio”.

Al defender los cambios en la política, el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, dijo que las medidas “se centrarán ante todo en el apoyo al pueblo cubano, incluidos sus derechos humanos y su bienestar político y económico”.

Price aseveró que las flexibilizaciones de Washington “apoyarían aún más al pueblo cubano, brindándoles herramientas adicionales para llevar una vida libre de la opresión del gobierno cubano y buscar mayores oportunidades económicas”.

Entre los cambios anunciados el lunes, se encuentran la eliminación del límite de remesas familiares y la ampliación del personal en la embajada de La Habana para tramitar visados. Además, se prevé restablecer los vuelos a ciudades cubanas que no sean La Habana y permitir los viajes en grupo para intercambios educativos o profesionales. La administración Trump había topado a 1000 dólares por trimestre las remesas familiares.

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