Laura Daniela, influencer cubana y exnovia de Sandro Castro —nieto del fallecido líder Fidel Castro—, volvió a acaparar titulares tras compartir en sus redes sociales un ostentoso regalo de graduación que no pasó desapercibido: dos carteras Louis Vuitton, una de ellas valorada en casi 7.000 dólares.

La joven, que acaba de obtener su título como médica veterinaria, publicó en sus historias de Instagram imágenes del emotivo momento, luciendo toga, acompañada de sus padres y sosteniendo el diploma. “Qué feliz soy, Dra. Veterinaria”, escribió. Pero lo que más captó la atención fue una foto adicional: dos bolsos Capucines BB de la exclusiva firma francesa, lo que desató una ola de comentarios entre sus más de 133 mil seguidores.

A pesar de haber terminado su relación con Sandro Castro a inicios de 2025, Laura Daniela ha mantenido una presencia constante en el ojo público. Actualmente combina su formación veterinaria con trabajos en estética, modelaje y promoción de eventos. De hecho, antes de la ruptura, era frecuente verla en el bar EFE, uno de los locales más populares del Vedado habanero, fundado por su expareja.

Laura no es ajena a la controversia. En 2021, protagonizó junto a Sandro un escándalo que aún genera reacciones en Cuba y su diáspora, cuando ambos fueron grabados conduciendo a toda velocidad un auto deportivo durante una grave crisis de apagones y escasez en la isla. El video fue ampliamente criticado como una muestra de desconexión con la realidad del país.

Este mismo mes de julio, volvió a encender las redes al declararse públicamente como una de las diez mujeres más bellas de Cuba. “Yo me siento bien conmigo misma… Hay muchachas muy bonitas, pero, sin parecer autosuficiente, yo creo que en el Top 10 entraría”, dijo, tratando de suavizar su afirmación. Sin embargo, las críticas no se hicieron esperar. Frases como “ni de cerca”, “con todos esos arreglos, me la juego que al natural no es así”, o “dice que para no parecer arrogante y procede a ser lo más arrogante posible”, inundaron los comentarios.

A sus 26 años, Laura Daniela sigue construyendo una imagen pública que combina aspiraciones de éxito, estética cuidada y una dosis constante de polémica. Su reciente graduación, lejos de cerrar una etapa tranquila, ha vuelto a colocarla en el centro del debate digital.

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