La creciente inseguridad en Cuba ha llevado a que los ciudadanos tomen la justicia por sus manos. Un nuevo caso de linchamiento ocurrió en Santiago de Cuba, específicamente en el reparto Pastorita, donde un hombre fue golpeado por vecinos tras supuestamente arrebatar un teléfono celular.

Según reportó el periodista Yosmany Mayeta Labrada en su página de Facebook, el individuo, cuya identidad aún se desconoce, fue capturado por los residentes de la zona luego de que cometiera el robo. Un testigo del hecho relató: “Aquí no queremos ladrones y eso se lo dejamos bien claro”.

Las imágenes compartidas muestran cómo el presunto delincuente fue golpeado por la comunidad como castigo antes de ser entregado a la policía (PNR). Este tipo de reacciones se han vuelto cada vez más frecuentes en distintas provincias del país, reflejando la desesperación de la población ante el incremento de la delincuencia y la poca confianza en las autoridades para frenar estos delitos.

El aumento de robos y actos violentos en Cuba ha sido denunciado en múltiples ocasiones a través de redes sociales, donde ciudadanos alertan sobre la falta de respuesta efectiva por parte del gobierno. En ciudades como La Habana, Camagüey y Santiago de Cuba, los casos de asaltos y arrebatos se han vuelto cada vez más comunes, generando un clima de temor entre la población.

Muchos atribuyen esta situación a la crisis económica que atraviesa el país, con una inflación galopante, escasez de productos básicos y el deterioro del poder adquisitivo. Estas condiciones han llevado a un aumento del crimen.

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