El gobierno de Rusia donó este jueves a Cuba cerca de 20 000 toneladas de trigo, luego de un acuerdo el año pasado para enviar los granos a la isla, que enfrenta una de las peores crisis de alimentos desde el comienzo de la revolución castrista.

Andrei Guskov, embajador ruso en Cuba, dijo en una ceremonia que el gobierno de su país había pactado la donación el año pasado, pero el barco que transportaba el cereal se detuvo frente a territorio cubano durante un mes, debido a las sanciones occidentales impuestas a Rusia tras su invasión de Ucrania.

Las restricciones relacionadas con la banca habían complicado los pagos de Rusia al transportista, haciendo imposible que el barco descargara y “convirtiera el trigo en pan para los cubanos”, explicó el diplomático, de acuerdo con un despacho de la agencia de noticias Reuters.

“Lo que sucedió muestra claramente que las medidas coercitivas unilaterales adoptadas contra Rusia, como las aplicadas contra Cuba, dañan la vida de la gente común”, sostuvo Guskov ante la prensa. La importante donación de trigo es la última de una serie de propuestas entre el régimen comunista de La Habana y Rusia, estrechos aliados políticos.

Rusia constituye uno de los mayores exportadores de trigo del mundo, y sigue exportando granos a Cuba y otros socios comerciales a pesar de las sanciones que han complicado la logística.

Días antes de invadir Ucrania, Rusia acordó posponer los pagos de la deuda de Cuba hasta 2027. Ambos gobiernos también acordaron profundizar los lazos y explorar la colaboración en materia de transporte, energía, industria y banca.

El 7 de abril, Cuba se unió a China, Corea del Norte, Irán, Siria y Vietnam para votar en contra de una resolución adoptada por la Asamblea General de la ONU para suspender a Rusia del Consejo de Derechos Humanos de la ONU por las denuncias de abusos contra los derechos humanos en los ataques a Ucrania.

De igual modo, Rusia representa uno de los mayores emisores de turismo hacia la isla. Recientemente, se conoció que ambos gobiernos estaban negociando para que los visitantes del país euroasiático pagaran en Cuba con tarjetas emitidas por el sistema bancario ruso, en sustitución de otras de multinacionales como Visa o MasterCard.

La vicepresidenta primera del Banco Central de Rusia, Olga Skorobogatova, aseguró que su país trabaja con vistas al lanzamiento en la Isla de las tarjetas Mir (Mundo), perteneciente al Sistema Nacional de Tarjetas de Pago (NSPK).

En la actualidad, las tarjetas Mir son aceptadas en Turquía, Vietnam, Armenia, Uzbekistán, Belarús, Kazajastán, Kirguistán, Tayikistán, Osetia del Sur y Abjasia. La funcionaria dijo que hay otros dos países con los que Moscú avanza en negociaciones, pero no reveló nombres.

La escasez de trigo en Cuba ha provocado que las panaderías estatales echen mano de otros recursos disponibles para la producción. En ese sentido, la semana pasada un directivo de investigaciones agropecuarias en Cuba sugirió el uso de harina de garbanzo en la elaboración de panes y dulces, al defender la relativa facilidad que ofrece el grano en cuanto a su cosecha.

“Estamos trabajando con algunos derivados de él como la harina de garbanzo que se puede usar en panadería y como extensores cárnicos, se pueden hacer combinaciones con sorgo, con chícharo y con trigo que también lo estamos trabajando. Con todo esto se puede hacer una buena cantidad de combinaciones tanto para repostería, como para panadería y extensores cárnicos”, dijo.

En 2021, la prensa oficialista confirmó que las panaderías estaban elaborando el alimento con productos alternativos ante la escasez de insumos, como la yuca y la calabaza.

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