Roban huesos en cementerio de Matanzas: “cómo puede haber gente tan cruel”

Redacción de CubitaNOW ~ jueves 19 de enero de 2023

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"Cuando llegamos a la bóveda vimos varias cajas abiertas a las que les faltaban los restos. Había huesos por dondequiera, parece que les cogieron las cabezas y las articulaciones a las personas", dijo María Esther Torres Ramírez sobre el día que fue a enterrar a su madre en el cementerio San Carlos Borromeo, de la ciudad de Matanzas.

"Yo nunca había visto cosa igual en mi vida. Uno de los trabajadores funerarios y el que sella la bóveda dijeron que harían la denuncia a la policía. Dejamos el cuerpo de mi madre con miedo, pero regresamos al día siguiente para comprobar que estaba. No entiendo cómo puede haber gente tan cruel y despiadada", contó.

Según el periódico oficialista Girón, en la necrópolis de San Carlos Borromeo han ocurrido robos de elementos de las bóvedas hasta la profanación de estas para extraer huesos con fines religiosos.

Beatriz Milián Robaina, residente en Pueblo Nuevo, habló sobre el panteón familiar. "Es la segunda vez que profanan la tumba. La primera fue hace unos años. Cuando llegué me encontré todo regado: las velas, los vasos, las flores… Llamé al administrador y no tuvo respuesta para darme".  

"Hace cuestión de un mes me avisaron que la tapa de una de las cajas donde se guardan los restos estaba partida. Cuando fuimos allí nos percatamos de que se habían robado las argollas y estaban esparcidos los huesos en el piso. Tuvimos que remendar aquello".

"Aquí se han llevado y roto hasta los angelitos. Quisimos hablar con el administrador, pero no estaba y no lo buscamos más. Como habitante de esta urbe me pregunto por qué el camposanto, donde descansan héroes y seres queridos, no tiene la misma vigilancia que otros lugares de la ciudad. En agosto enterramos a un familiar y no existía con qué cerrar la tumba, al menos eso nos dijeron. En medio del dolor tuvimos que traer cemento para darle sepultura".

El administrador en funciones del cementerio, José Ángel García Rodríguez, dijo que "la vigilancia no es la adecuada, pues presentan problemas con la plantilla de custodios. Solo disponen de 10, en turnos de 24 por 72 horas, cuando en realidad necesitan al menos 20 para cubrir los 135 000 metros cuadrados que posee el camposanto, el segundo más extenso del país".

Además, la guardia se concentra en el área de la entrada porque no hay disponibilidad de iluminación. "Solo existe una luz en la capilla principal. A eso se añade la falta de un muro que impida la entrada de personas por el lateral derecho".

El dirigente dijo a Girón que no ha recibido quejas por profanación, pero sí se reportaban con frecuencia robos de argollas de bronce, al punto de que en la actualidad son muy pocas las tumbas que disponen de este aditamento. También se daban casos de sustracciones de huesos para ceremonias religiosas.

"Son problemas que hemos ido resolviendo a partir de la separación de empleados que se involucraban en tales delitos. No obstante, continuamos trabajando en ese sentido", apuntó.

José Antonio Piedra Medina, director municipal de Servicios Comunales, explicó que "en todo enterramiento hay que sellar la bóveda. Hoy es garantía el cemento y el polvo de piedra (cocó), que son los materiales establecidos para ello. Puede haberse dado algún caso puntual, quizá fue muy tarde y el sepulturero dijo que no tenían cemento porque era el último entierro. Pedimos que esas cosas las comuniquen a la Dirección Municipal al 45 244814, que es el puesto de mando para adoptar las acciones rápido".

Sin embargo, el dirigente reconoció que en algún momento presentaron dificultades con los materiales de construcción, fundamentalmente cocó, inconveniente que quedó resuelto desde finales de diciembre, en que depositaron un camión en el lugar. No obstante, suman tres, y no cuatro como debieran ser, los sepultureros encargados de dicha faena, reseñó Girón.


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