Un apagón masivo ha afectado a varios países europeos, incluyendo España, Portugal, Andorra, Francia y Alemania, a partir de las 12:35 horas, con un impacto que no se recuerda en los últimos años. El motivo del corte de luz aún es incierto, y las autoridades y las compañías eléctricas aún no han emitido una explicación oficial. Según las primeras informaciones, el suministro eléctrico cayó en una magnitud de hasta cien mil megavatios, y, por ahora, el servicio sigue interrumpido en esos cinco países, aunque podrían sumarse más lugares afectados. Solo los generadores de emergencia continúan funcionando.

El apagón ha tenido consecuencias significativas en diversos servicios. Hospitales, comercios, trenes y metros se han visto gravemente afectados. Los hospitales han tenido dificultades para operar con sus servicios eléctricos habituales, mientras que muchos comercios han quedado sin la capacidad de operar con datáfono, obligando a recurrir al dinero en efectivo. Igualmente, muchos semáforos, cajeros automáticos y otros servicios esenciales están fuera de servicio, lo que está generando complicaciones en la movilidad y otros aspectos de la vida cotidiana.

En cuanto a las telecomunicaciones, las operadoras telefónicas también han sufrido interrupciones, lo que ha dejado a muchos teléfonos móviles incomunicados, exacerbando aún más la crisis. La magnitud del apagón ha sido tal que incluso algunos accidentes de tráfico se han producido debido a la falta de funcionamiento de los semáforos. El Gobierno español aún no tiene una explicación clara, pero ya ha convocado una reunión de emergencia en Moncloa para tratar de abordar la situación.

En Lisboa, capital de Portugal, la situación se ha complicado aún más, con las autoridades locales confirmando que los semáforos no están funcionando y que el metro de la ciudad, junto con el de Oporto, ha sido cerrado. En cuanto a la compañía responsable del suministro eléctrico y gas en Portugal, esta ha confirmado que se ha producido un "corte masivo" en toda la península ibérica, además de afectar parcialmente al territorio francés. El Gobierno portugués ha activado un grupo de trabajo para supervisar el apagón.

Por su parte, en Francia algunas zonas experimentaron un breve corte de electricidad, pero el servicio se ha restablecido en la mayoría de los lugares. No obstante, el gestor nacional de la red, RTE, ha comenzado a investigar cómo movilizar las interconexiones eléctricas para intentar restablecer el suministro en España, que sigue bajo un apagón total. Un punto de particular interés ha sido el túnel Bielsa-Aragnouet, que separa España y Francia, donde el suministro eléctrico sigue funcionando, pero únicamente en la parte francesa del túnel.

La situación sigue siendo incierta, y las autoridades continúan trabajando en el restablecimiento de los servicios, mientras la ciudadanía de los países afectados permanece a la espera de más información oficial. Los esfuerzos por recuperar el suministro eléctrico continúan, y se espera que en los próximos días haya avances en la restauración total de los servicios en los países afectados por este apagón sin precedentes en Europa.

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