Policía decomisa 20 sacos de limones a vendedor en Camagüey y desata indignación
Redacción de CubitaNOW ~ martes 14 de octubre de 2025

Una nueva escena de abuso policial en Cuba causa indignación entre los internautas, tras difundirse en redes el testimonio de un vendedor de Camagüey al que la policía le decomisó 20 sacos de limones durante un control en la madrugada.
Según el reporte compartido por la página La Tijera, el hombre viajaba en un ómnibus con su carga destinada a la venta en la ciudad cuando fue detenido por los agentes, quienes incautaron todos los sacos sin presentar una justificación convincente. Cansado del atropello, el vendedor no pudo contener su rabia y lanzó una frase que rápidamente se hizo viral:
“¿Para dónde llevan esos limones, para sus casas? ¡Ah no, ya sé! Se los van a mandar para La Habana a Limonardo, para que siga elaborando la base de todo.”
La referencia a “Limonardo” —una alusión sarcástica a la figura propagandística del régimen y a la absurda narrativa oficial sobre la “base de todo”— provocó una ola de reacciones en redes sociales, donde muchos vieron en el comentario una forma de resistencia popular ante el abuso de poder.
En los comentarios, decenas de usuarios denunciaron que hechos como este son cotidianos en la Isla, donde los trabajadores por cuenta propia enfrentan decomisos arbitrarios, multas excesivas y persecución constante bajo el pretexto de “control económico”. Mientras tanto, los productos decomisados muchas veces desaparecen sin rastro ni destino claro.
“Los policías deberían estar cuidando al pueblo, no quitándole la comida”, escribió una internauta. Otro comentó: “Así es como destruyen la iniciativa de los cubanos que intentan sobrevivir sin robar”.
El incidente vuelve a poner en evidencia el clima de desconfianza y frustración que se vive en Cuba, donde el esfuerzo individual es reprimido y la escasez golpea con más fuerza a quienes intentan ganarse la vida de manera honesta.
Como señaló La Tijera en su publicación, “esta es solo una escena más del absurdo y el abuso institucionalizado que padecen los trabajadores por cuenta propia en Cuba”.