Nueva avería en termoeléctrica de Cienfuegos agrava el colapso eléctrico en Cuba
Redacción de CubitaNOW ~ martes 16 de diciembre de 2025
Una nueva falla en el sistema electroenergético nacional volvió a encender las alarmas en Cuba este lunes por la noche, cuando se reportó una avería en la turbina de la Unidad 4 de la Central Termoeléctrica (CTE) “Carlos Manuel de Céspedes”, en la provincia de Cienfuegos. El incidente ocurrió durante el proceso de arranque de la unidad, según informó la Unión Eléctrica (UNE), y se suma a una larga cadena de fallos que mantienen al país inmerso en una profunda crisis energética.
De acuerdo con la información oficial, la avería obligó a detener inmediatamente el arranque de la unidad y activar los protocolos técnicos y de seguridad establecidos. Un equipo integrado por especialistas de la dirección nacional de la UNE y técnicos de la propia planta se encuentra investigando las causas del fallo, aunque hasta el momento no se ha ofrecido un plazo concreto para la reincorporación de la unidad al sistema.
La CTE “Carlos Manuel de Céspedes” es una de las principales instalaciones generadoras del país y su salida, aunque sea parcial o temporal, tiene un impacto directo en la ya frágil capacidad de generación eléctrica. La unidad afectada debía aportar una parte significativa de energía al Sistema Electroenergético Nacional (SEN), que en los últimos meses opera con un margen mínimo, dependiente de plantas obsoletas, mantenimientos aplazados y una disponibilidad irregular de combustible.
Este nuevo contratiempo ocurre en un contexto marcado por apagones prolongados y generalizados en casi todas las provincias del país. En numerosas localidades, los cortes de electricidad superan las 12 y hasta las 18 horas diarias, afectando no solo la vida doméstica, sino también servicios básicos como el bombeo de agua, la conservación de alimentos, el transporte y la actividad económica en general. Hospitales, escuelas y centros productivos funcionan con severas limitaciones, muchas veces dependiendo de grupos electrógenos igualmente afectados por la escasez de diésel.
Especialistas independientes y ciudadanos han señalado reiteradamente que el problema no se limita a averías puntuales, sino que responde a un deterioro estructural del sistema eléctrico cubano. La mayoría de las termoeléctricas del país superan los 30 y 40 años de explotación, operan sin el mantenimiento capital requerido y con piezas improvisadas ante la falta de recursos y repuestos. Cada intento de arranque se convierte en una operación de alto riesgo, como demuestra la avería registrada en Cienfuegos.
Mientras la UNE promete “continuar informando” sobre la investigación técnica, la población enfrenta el impacto inmediato del déficit de generación, con ajustes forzados en los cronogramas de apagones que, en la práctica, suelen extenderse más allá de lo anunciado. La falta de transparencia sobre el estado real de las plantas y la ausencia de soluciones a corto plazo alimentan el descontento y la incertidumbre.