Venezuela vive días de intensa actividad política ante la perspectiva de un posible cambio. La dupla opositora, María Corina Machado y Edmundo González Urrutia, inició su campaña electoral con una manifestación en Valencia, la tercera ciudad más grande del país, sin promociones previas ni una hora clara para el evento.

Desde temprano, la policía bloqueó todos los accesos a la ciudad, y el tráfico fue detenido repetidamente en la autopista desde Caracas. Machado, visiblemente molesta, confrontó a los oficiales y continuó su trayecto en una moto ofrecida por un voluntario, logrando llegar a Valencia tras cuatro horas de viaje.

En Valencia, la oposición enfrentó más desafíos: la policía estatal estaba desplegada por la ciudad, el metro estaba cerrado y no había autobuses. Pese a estos obstáculos, simpatizantes y curiosos se congregaron en la avenida Bolívar esperando a los líderes opositores. Las dificultades impidieron montar una tarima o usar micrófonos, por lo que se organizó una caravana para desplazarse por la ciudad.

Elena Alcántara, presente en la manifestación, expresó su deseo de ver a sus hijos regresar a una Venezuela normalizada. María Corina Machado y Edmundo González Urrutia aparecieron sobre el mediodía, recorriendo la multitud en un Jeep. La manifestación se expandió rápidamente, alimentada por el entusiasmo de los asistentes que coreaban "libertad" y "este Gobierno va a caer".

A pesar de la falta de un micrófono, la presencia de Machado energizó a la multitud. La manifestación terminó con los asistentes satisfechos de haber visto a sus líderes, a pesar de no haber podido escuchar un discurso formal. Este evento subraya la resiliencia de la oposición y su determinación para lograr un cambio en Venezuela, enfrentando un gobierno que intenta frenar su avance.

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