La madre del bebé cubano fallecido en un hospital de La Habana desmintió la versión oficial dada por la dirección del Hospital Pediátrico San Miguel del Padrón.

"En ningún momento el niño llegó a abrir la boca, nunca tomó leche, porque ellos lo reanimaron y nunca soltó leche. Después se lo llevaron enfermería y ahí le llevaron el pomo (botella) de leche y el pomo regresa con una onza menos", dijo Daniela Rivero al medio independiente ADN Cuba.

Según la madre, la nota del hospital escribió mal la fecha de la muerte de su pequeño Dylan Mateo Matos Rivero: 24 de marzo, cuando el lactante de 42 días falleció en la madrugada del 23 de marzo, apuntó la citada fuente.

"Quiero contradecir la nota que dio el hospital; todo lo que dice la nota es falso. Hubo procedimientos que dice la nota que le hicieron y a nosotros nunca nos lo dijeron".

Otro fuente no identificada y cercana a la familia que estuvo en el hospital dijo a ADN Cuba que a las 6:10 p.m. del 22 de marzo le inyectaron metilprednisolona cuando hasta ese momento ya le habían dado dos aerosoles.

"Después de eso es que el niño tenía tiraje, la barriga la tenía muy agitada y la doctora le manda otro aerosol, el tercero, y ponerle otro toque del mismo medicamento. Luego determinaron llevarlo para terapia porque el niño no tenía ninguna mejoría".

La familia agregó a ADN Cuba que no la tuvieron en cuenta para la publicación de la nota oficial.

La semana pasada el padre del lactante denunció su muerte. "Hoy, 23 de marzo, a las 2 de la madrugada falleció mi hijo Dylan Mateo en el hospital (Balear) San Miguel del Padrón", dijo Marco Miguel Matos Blanco.

"El niño llegó al hospital porque estaba cianótico pero en estado estable", señaló el padre antes de enumerar una serie de prácticas de los especialistas.

"Los médicos procedieron a ponerle un aerosol luego de hacerle varios ciclos. Ven que no mejora en agitación, el niño estaba ya de color normal y le ponen una focus de metilprednisolona para calmar la agitación".

"Al ver que seguía igual lo ingresan en terapia intermedia, lo tienen en estado estable pero a las 9 de la noche los médicos mandan a darle la toma que le correspondía. Al proceder a darle la toma, el niño hizo una broncoaspiración la que lo llevó a entubación respiratoria".

"Estuvo sedado alrededor de tres horas. Cuando los doctores llaman para dar el parte, informan a los familiares de que el niño estaba crítico, que no se contaba con él".

"Luego de entrar los doctores, a la una (de la mañana) llaman que el niño tuvo un paro respiratorio y estuvieron 45 minutos reanimándolo pero fue por gusto, que hasta le pusieron aminofilina, medicamento que los padres tienen que firmar de conciencia que puede provocar paros respiratorio, pero el papel nunca no los enseñaron. Atentamente, el padre", concluyó.

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