Madre cubana cuenta su incertidumbre diaria con el transporte de su hijo autista a la escuela
Redacción de CubitaNOW ~ martes 23 de mayo de 2023

La artista cubana Nara Miranda Lorigados compartió este martes los trabajos que pasan las madres en La Habana con el transporte para la escuela. En su caso particular, un poco más porque su hijo es autista y necesita una preparación previa que puede ser por gusto algunos días.
"En el malecón, hace un rato, viendo el mar de la mañana. Descubriendo palabras grabadas en el muro... (¿quién será Chiqui?) Y aprovechando que hoy sí pasó la guagua de la escuela de mi hijo mayor. Las guaguas de escuelas especiales siguen funcionando, milagrosamente. Fallan dos o tres veces a la semana. A veces sólo una vez", contó en Facebook.
"Vivimos en la incertidumbre. A veces logran llevar al niño hacia allá, y al mediodía te llega un mensaje de que vayas a buscarlo tú misma, porque no hay combustible para regresar, o se rompió una pieza, o lo que sea".
"Otras veces ni siquiera logran llevarlo allá. Hago el esfuerzo de tenerlo listo y vestido antes de las siete de la mañana, parado en el punto de recogida, con su almuerzo en la mochila, con la actitud y la idea correcta; contento y todo, diciendo: '¡Guagua, escuela, maestra!' Y entonces la guagua no pasa".
"Los niños autistas necesitan saber lo que va a pasar. Anticipar y prepararse mentalmente. No manejan bien los cambios bruscos en el plan. Que él vaya contento al punto de recogida lleva un trabajo previo, establecer una rutina".
"Cuando la guagua falla, toda esa preparación se vuelve un problema. Lo que iba a pasar, ya no va a ocurrir. Llamo a la maestra que siempre los cuida en el traslado, y me dice algo de una manguera rota, o que no hay combustible, o lo que sea. No se oye bien. Tengo que hablar alto: '¡¿Qué?! ¿Y tiene arreglo? ¿No? ¿ENTONCES NO HAY GUAGUA?! Ah. Gracias..."
"Ahí Santiago, que entiende perfectamente la frase, se altera. '¿Guagua? ¡La guagua está rota! ¡OH NO! ¡¡ADIÓS GUAGUA!! ¡¡ADIÓS ESCUELA!!' Y así gritando hasta la casa... Hasta la casa, porque ese día no voy a llevarlo hasta Nuevo Vedado, en la ruta 27, comprimido entre personas desconocidas, en medio de la incomprensión mutua. La gente no entiende porqué un niño tan grande va protestando en una jerigonza extraña, hay hasta quien me pregunta qué idioma está hablando".
"Santiago, por su parte, no entiende por qué esas personas, que no conoce, se le acercan tanto y tratan de aplastarlo entre todos... Así que no lo llevo, porque además, si no hay guagua escolar por la mañana, tampoco la hay para el regreso, y eso sería otra ruta 27. Sin hablar del tiempo de espera en la parada..."
"En fin. Los días que no hay guagua los pasa conmigo, cancelo cosas que tenga que hacer y, si acaso, damos un paseo buscando vegetales en algún agro que no tenga cola. Y pierde sus clases".
"El hermanito, José, que va a una escuela de enseñanza general, muy cerca de la casa, sí está en sus clases desde temprano. Lo de que la escuela de tu hijo quede cerca, y esté ahí, sobre sus cimientos sin moverse, es algo que una no aprecia lo suficiente hasta que no lo tiene. La tranquilidad de que se te hace tarde cinco minutos, y no importa, porque la escuela sigue ahí esperándote, y no se va rodando hasta otro municipio, como hace la guagua de Santi; eso es algo que hay que agradecer".
"En fin. Hoy sí hubo guagua. Estoy sola. Puedo pintar tranquila todo el día. Puedo empezar la mañana yendo al malecón a ver el mar, que está precioso. Mañana vuelve lo de la incertidumbre. Pero hoy, en este momento exacto, por ahora, estoy bien", confesó.

Varios cubanos le enviaron fuerzas a Nara Miranda Lorigados y a su hijo.
"Me siento tan identificada contigo, Nara. ¡Es la misma historia todos los días! Rezando para que todo esté en orden y poder ir a trabajar en paz. Es tan estresante para ellos como para nosotras y es tan complicado saber que muchas personas no entienden. Me uno a tí y te abrazo por este día que tienes en calma y en orden".
"Es duro la verdad. Has narrado parte de tu vida en unas palabras pero la verdad si no lo haces revientan por dentro. Lo mejor que hiciste fue eso y sentarte junto al mar, que eso es la paz y saber que mañana será otro día y disfrutar a tus niños cada momento. Dura la realidad que se está viviendo en nuestro país. Fuerza amiga y respira profundo cada mañana, tus niños son los que no te pueden ver estresada".
"Increíble Nara, qué desorden, qué falta de respeto con las madres y con los niños como el tuyo que necesitan tanto ir a la escuela en un transporte escolar y no aplastado en una ruta 27. Me alegro mucho que estés disfrutando hoy de un lindo día y pintando".
"¡Ay, Nara! ¡Qué complicado es todo en nuestras vidas! La tuya aún más dada la condición de Santi y el esfuerzo extra que requiere crear el entorno adecuado para él. No sé de dónde sacas fuerzas para enfrentar el día a día. Bueno, sí lo sé en realidad: se llama amor. Amor infinito por tus hijos. Eres una gran madre y la tuya estaría orgullosa de ti".