Lara Crofs alerta sobre desigualdad en el reparto Guiteras, algunos edificios nunca sufren apagones
Redacción de CubitaNOW ~ jueves 11 de septiembre de 2025

La intelectual cubana Lara Crofs denunció recientemente en su perfil de Facebook una situación de profunda desigualdad en el reparto Guiteras, ubicado en la calle 24 entre 2 y 4ta, en Habana del Este.
Según Crofs, mientras la mayoría de los residentes enfrentan apagones prolongados, actualmente acumulando más de 12 horas sin electricidad más el apagón en toda Cuba, 23 días sin agua y la incertidumbre sobre la disponibilidad de gas licuado, existen edificios que parecen inmunes a la crisis energética y de servicios.
Estos edificios, asegura Crofs, no son producto de una mejor gestión ni de un milagro, sino de la obediencia y fidelidad al régimen.
Allí residen militares trasladados desde Oriente, cuya función en La Habana es garantizar la disciplina y mantener la lealtad a la cúpula gubernamental, así como la represión eficiente contra quienes piensan diferente.
Crofs describe estos edificios como “los nuevos palacios del servilismo”, donde nunca falta la luz, el agua fluye sin interrupciones y el gas llega de manera puntual, en contraste con el resto del barrio, que vive carencias cotidianas.
La denuncia de Lara Crofs subraya que la fidelidad ideológica se ha convertido en una moneda de cambio, y que mientras el pueblo sufre por servicios básicos, quienes apoyan y ejecutan la política del régimen disfrutan de privilegios significativos.
“El mensaje es claro y grotesco: ser fiel al régimen no garantiza dignidad, pero sí privilegios”, escribió Crofs.
La intelectual apunta que los habitantes de estos edificios no son ciudadanos comunes, sino “centinelas” del poder, y que lo que se exhibe en estas viviendas no es progreso, sino una desigualdad obscena en medio de la crisis nacional.
La publicación de Lara Crofs incluye una fotografías que muestran la diferencia entre los edificios privilegiados y el resto del barrio, donde los vecinos deben lidiar con la falta de electricidad, agua potable y gas para tareas básicas como encender un bombillo, colar café o bañarse.
La denuncia busca visibilizar la brecha entre ciudadanos comunes y quienes sostienen al aparato represivo, y ha generado amplia repercusión en redes sociales y medios independientes.