Un joven cubano destapa con su denuncia la corrupción imperante en las terminal de ómnibus interprovinciales La Habana.

Yunior Vergara admite que se cansa de la lucha del día a día y más cuando sufre situaciones como la vivida.

 “¡Cuba que linda es Cuba quien la defiende la quiere más! ¡Más! ¿En serio, más?

Mire sé que puedo parecer disco rallado, pero soy universitario, estudiante, actor,...y el bla bla bla que todos sabemos”, explica.

Vergara cuenta que cuando había perdido las esperanzas de poder embarcarse en un viaje hacia la provincia de Granma, una persona se le acercó para ofrecerle un pasaje de autobús.

“Señor mío después de estar a las 5 y media en la terminal para fajarme en una lista de espera que tan solo tiene una capacidad de 50 personas para anotarse, y no poder estar en ninguna opción de viaje, ya al borde del desespero un señor me propone un pasaje para Bayamo y le pregunto si es en carro o taxi, dice ‘no, en ómnibus’, a pues sí -le dije- y ¿cuánto? -¡1500 pesos!”, advierte.

El cubano reclama que no entiende cómo esta situación puede ocurrir en la cara de todos los necesitados, cuando de las pocas capacidades de lista de espera solo venden una o dos y las otras las utilizan para lucrar.

“¿Y esa pin...? ¿Cómo y por qué esto pasa?. ¿Cómo me van a vender en primer lugar un pasaje por la izquierda? ¡Tal vez ese mismo me tocaba a mí en mi digna y honrada lista de espera, pero no! De las 7 capacidades que dan solo ofrecen 3 o 4 cuando más y las otras es el negocio sucio de otras personas. ¡Y a eso súmale la vida de ser cubano! ¿Cuba que linda es Cuba, coño quién la defiende?”, reclama.

El actor también expone que el tema del transporte es una cosa que está fuera de explicación, y explica que “un pasaje a La Habana está en 3000 pesos, fuera de la terminal”.

En los comentarios otros cubanos testimonian sobre la grave situación.

“Te lo creo porque eso mismo me hicieron a mi una de las tantas veces que fui a Camagüey. Cuba que linda era Cuba”, alega Israel Fonseca Leyva.

Para la internauta Zolgema Granados Guerrero no es algo de extrañarse “ya aquí comenzaron los apagones, pero somos continuidad y to’ ta’ bien, somos la potencia de la impotencia”, señala.

“Ahora cualquier estúpido ve esta publicación y te critica y dice que la Revolución, que el bloqueo y nadie dice nada de la falta de vergüenza”, dice Sayli Alba Álvarez.

Reinaldo Rodríguez Sierra habla de la hipocresía que se vive en el país: “Ese mismo individuo que le pidió 1500 ‘cañas’ es obrero ejemplar y tiene un pulóver que dice ‘yo soy Fidel’”, indica.

Para Yancarlos Orozco cada cubano se da cuenta tarde o temprano del fiasco: “Todos nos damos cuenta algún día, pero eso ha pasado en Cuba toda la vida desde que el delincuente con barba se robo la isla”, lamenta.

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