El estado de salud del niño cubano Geobel Damir Ortiz Ramírez sigue siendo crítico mientras permanece en terapia intensiva en La Habana. El pequeño, quien padece neurofibromatosis tipo 1 y un neurofibroma plexiforme en el ojo derecho, ha experimentado un alarmante deterioro en los últimos días, con una significativa caída de plaquetas y hemoglobina, así como sangrado facial.

Los médicos han implementado un tratamiento intensivo que incluye la administración del antimicótico Anfotericin B y múltiples transfusiones de plaquetas, plasma y glóbulos rojos. A pesar de estos esfuerzos, su estabilidad hematológica sigue sin alcanzarse, y la necesidad de nuevas transfusiones es constante. Según los reportes más recientes, Damir será nuevamente transfundido con tres unidades de plaquetas, algo que debió haberse realizado el día anterior debido a su bajo conteo de 13,000 plaquetas.

En cuanto a su evolución, el niño sigue recibiendo oxígeno a través de un catéter nasal y aerosoles para mejorar su respiración. Aunque ha mostrado una ligera mejoría en este aspecto, aún tiene dificultad para alimentarse y ha presentado una disminución en la cantidad de orina, lo que preocupa a los especialistas.

Mientras tanto, su familia y allegados continúan en la difícil espera de una respuesta sobre la posibilidad de obtener una visa humanitaria para trasladarlo a Estados Unidos, donde podría recibir tratamientos más avanzados. Esta alternativa representa una esperanza para mejorar su pronóstico y brindarle una mejor calidad de vida.

En medio de esta difícil situación, los padres de Damir han solicitado apoyo y oraciones para su recuperación, con la esperanza de que su frágil estado de salud logre estabilizarse.

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