Robert Redford, uno de los rostros más emblemáticos del cine estadounidense, falleció a los 89 años, según confirmaron medios internacionales. Actor, director, productor, ambientalista y fundador del Festival de Sundance, Redford deja tras de sí un legado que marcó varias generaciones de cinéfilos.

Nacido en 1936, Redford comenzó su carrera en la televisión a finales de los años cincuenta, participando en series como Maverick. Su salto al estrellato llegó en 1969 con Butch Cassidy and the Sundance Kid, junto a Paul Newman, con quien formaría una de las duplas más recordadas del cine. En 1973 volvieron a coincidir en The Sting, cinta que le valió a Redford su primera nominación al Oscar como actor principal.

A lo largo de su carrera interpretó a héroes, aventureros, jugadores y personajes complejos en títulos memorables como Todos los hombres del presidente (1976), El gran Gatsby (1974), Los tres días del cóndor (1975), Memorias de África (1985) y El hombre que susurraba a los caballos (1998). En esta última etapa de su trayectoria también fue reconocido por Cuando todo está perdido (2013), un papel casi sin diálogo que demostró su capacidad interpretativa incluso en la madurez.

Como director, Redford debutó con Ordinary People (Gente corriente, 1980), que obtuvo el Oscar a mejor película y mejor dirección, consolidándolo como un cineasta de talento. Posteriormente dirigió títulos como A River Runs Through It (El río de la vida, 1992) y Quiz Show (1994), por la que fue nominado como director y productor. En 2002 recibió un Oscar honorífico por su contribución al cine, en particular por la creación del Instituto Sundance y el festival homónimo, considerado la plataforma más importante del cine independiente en Estados Unidos.

Más allá de la pantalla, Redford se destacó por su activismo ambiental. Desde que se estableció en Utah en los años sesenta, se convirtió en una voz influyente en la defensa de los paisajes naturales del oeste estadounidense, apoyando iniciativas de conservación y desarrollo sostenible.

Su despedida de la actuación llegó con The Old Man and the Gun (2018), aunque posteriormente tuvo una breve aparición en Avengers: Endgame (2019). “He estado haciendo esto desde que tenía 21 años, y pensé que ya era suficiente”, declaró al anunciar su retiro.

Con su carisma, talento y compromiso con causas artísticas y ambientales, Redford se convirtió en una figura imprescindible del séptimo arte. Su nombre quedará asociado tanto a las grandes producciones de Hollywood como a la consolidación del cine independiente.

Robert Redford deja un legado inmenso que va más allá de su filmografía: fue un artista integral, un impulsor cultural y una figura que supo conjugar el brillo del estrellato con la defensa de valores más profundos.

Recomendado para ti