Este martes, los candidatos a la vicepresidencia de Estados Unidos, Tim Walz y JD Vance, tendrán su primer y único debate en la recta final de las elecciones presidenciales de noviembre. Walz, gobernador demócrata de Minnesota, y Vance, senador republicano por Ohio, se enfrentarán con el objetivo de ganar apoyo para sus respectivos equipos y demostrar su capacidad para asumir la presidencia si fuese necesario.

Ambos candidatos buscarán defender a sus compañeros de fórmula: Kamala Harris, la actual vicepresidenta, y Donald Trump, expresidente de EE.UU. Además, intentarán presentarse como figuras competentes que podrían ocupar la Casa Blanca en un futuro. Para ello, deberán mantener la compostura y evitar caer en ataques personales que los dejen mal parados frente a la audiencia.

Tim Walz ha sido entrenado por Pete Buttigieg, secretario de Transporte, mientras que JD Vance ha recibido la asesoría del congresista Tom Emmer. Estos preparativos indican que ambos equipos están tomando el debate con seriedad, conscientes de que cualquier desliz podría tener un impacto negativo en la campaña.

El formato del debate será moderado por Norah O'Donnell de CBS Evening News y Margaret Brennan de Face the Nation. Ambos candidatos tendrán dos minutos para responder a las preguntas, seguidos de dos minutos de réplica del oponente. Los moderadores podrán otorgar tiempo adicional si lo consideran necesario.

Vance enfrenta una mayor presión en este debate, especialmente tras el débil desempeño de Trump en su reciente enfrentamiento con Harris. Conocido por su obra Hillbilly Elegy, Vance ha sido una figura polémica en los últimos meses, particularmente por sus declaraciones sobre inmigrantes y el gobierno. Este debate le ofrece una oportunidad para mejorar su imagen y atraer votantes indecisos.

Walz, aunque menos conocido a nivel nacional, tiene una amplia experiencia como gobernador y en la Guardia Nacional. Se espera que aproveche el debate para destacar sus logros en política estatal y sus propuestas sobre salud reproductiva, un tema que ha generado debate tras una confusión sobre su experiencia personal con tratamientos de fecundación in vitro (FIV).

A diferencia de otros debates, este se llevará a cabo sin público presente en los estudios de CBS en Nueva York, lo que elimina la posibilidad de reacciones en vivo de la audiencia. Los candidatos estarán de pie detrás de podios y deberán centrarse en transmitir sus mensajes sin distracciones externas.

Aunque los debates vicepresidenciales rara vez han definido el curso de una campaña, el enfrentamiento entre Walz y Vance podría ofrecer una visión más clara de los futuros líderes del país. Ambos candidatos provienen de regiones afectadas por la desindustrialización, como el cinturón del óxido, y han intentado conectar con los votantes de esas áreas mediante su experiencia personal y sus propuestas.

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