El reguetonero cubano Abel Díaz, conocido como El Chulo, volvió a generar revuelo en redes sociales al lanzar un reto directo a Chocolate MC, actualmente preso en Miami. A través de una historia en Instagram, propuso pagar la fianza de su colega con la condición de que acepte un enfrentamiento de seis asaltos de boxeo cuando quede en libertad.

“Alguien que tenga contacto con Chocolate, si hay que pagar una fianza o algo que me tiren para darle el dinero. Pero la condición va a ser que, cuando salga, tiene que firmar un contrato para pelear seis asaltos conmigo en un ring. El precio que sea, la fianza que sea, lo que haya que hacer, tírenme por privado. Le voy a pagar la fianza, pero tiene que firmar el contrato… Le voy a dar knockout”, declaró el artista con tono desafiante.

La propuesta se enmarca en la creciente popularidad de los combates de boxeo entre celebridades, un fenómeno que va desde la Velada 5 de Ibai Llanos en España hasta el mediático duelo entre Jake Paul y Mike Tyson, transmitido por Netflix. Dentro del reguetón, ya se han visto antecedentes como el enfrentamiento entre el cubano Ovi y el boricua Bryant Myers.

El Chulo parece querer sumarse a esta tendencia, potenciando su imagen de artista provocador y competitivo. En los últimos días, se ha mostrado en redes sociales como un “millonario”, compartiendo imágenes de autos de lujo, relojes costosos y propiedades en Miami, ciudad donde se ha consolidado su carrera.

Mientras tanto, la situación legal de Chocolate MC (Yosvani Arismín Sierra Hernández) es complicada. Arrestado el pasado 4 de junio, enfrenta graves cargos en Estados Unidos: secuestro con arma de fuego, robo a mano armada, allanamiento de morada, amenazas de muerte y posesión de drogas, sin derecho a fianza. Su historial judicial ya incluía procesos por violencia doméstica, posesión de sustancias y problemas con armas de fuego.

Aunque en abril había recuperado la libertad bajo fianza tras otro arresto, ahora se encuentra en un escenario mucho más delicado. En ese entonces, su madre apareció en redes llorando y asegurando que su hijo había “perdido la mente”, un reflejo del costado humano detrás de las polémicas que lo rodean.

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