Una impactante escena se vivió al norte de Fort Worth, cuando una avioneta Beechcraft King Air C90 se estrelló contra varios camiones de carga estacionados, provocando una explosión tan fuerte que se vio y escuchó a varios kilómetros de distancia.

El accidente ocurrió en la cuadra 12700 de North Saginaw Boulevard, cerca de Avondale. Testigos relataron que la aeronave había despegado minutos antes del Alliance Airport, pero algo salió terriblemente mal. “Fue una bola de fuego gigante, el cielo se iluminó y todo tembló”, contó un vecino que presenció el siniestro desde su vivienda.

Las dos personas que viajaban a bordo del avión murieron en el acto. Afortunadamente, no se reportaron víctimas entre los trabajadores o conductores que se encontraban en el estacionamiento. De no haber sido por la rápida intervención de los bomberos de Fort Worth, el saldo habría sido mucho peor. Ellos lograron controlar el incendio en apenas 35 minutos, evitando que las llamas alcanzaran otros vehículos cargados de combustible.

Videos publicados en redes sociales muestran una densa columna de humo negro elevándose al cielo, mientras las sirenas de los equipos de emergencia dominaban el sonido del lugar. La escena parecía sacada de una película: fuego, metal retorcido y el olor a combustible quemado en toda la zona industrial.

Las autoridades de la FAA (Administración Federal de Aviación) y la NTSB (Junta Nacional de Seguridad en el Transporte) ya están investigando las causas del accidente. Se barajan varias hipótesis, entre ellas una posible falla mecánica o pérdida de potencia del motor poco después del despegue.

Vecinos y testigos han expresado su tristeza por las víctimas, y muchos resaltan la valentía de los equipos de rescate que arriesgaron su vida para controlar el fuego.

“Fue aterrador, pensamos que iba a explotar todo el parqueo”, dijo una trabajadora de una empresa cercana.

La comunidad de Fort Worth se encuentra consternada y las autoridades locales pidieron evitar la zona mientras se realizan las labores de limpieza y peritaje.

¡Una vez más, la tragedia toca el cielo!

Fuente: La Tijera

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